La locura por Pokemon Go ha llegado al Ayuntamiento. Usuarios del videojuego se plantan en María Pita a diario porque es uno de los puntos claves de la ciudad. En concreto, es un gimnasio, lo que significa que los usuarios pueden entrenar o combatir con los personajes que capturan con sus teléfonos móviles por las calles de la ciudad. Para ello, es necesario que se desplacen hasta el palacio municipal. La presencia de pokemons en el Concello recuerda inevitablemente a la operación Pokemon, en la que permanecen imputados exconcejales del PP, PSOE y BNG por presuntas irregularidades en la adjudicación de contratos públicos.