El Concello descarta recuperar el tranvía turístico en cualquier de sus recorridos. A principios del mes de junio, el alcalde, Xulio Ferreiro, aseguraba que analizaba la posibilidad de que volviese a funcionar, pero exclusivamente en el tramo entre Las Esclavas y la Torre de Hércules, ya que desde el faro hasta el castillo de San Antón requeriría volver a instalar las catenarias. Un mes después, el Gobierno municipal, sin embargo, asegura que su intención es "mantenerlo sin servicio".

El Ejecutivo concreta sus planes sobre el tranvía turístico en respuesta a una pregunta escrita del PSOE, que también se interesó sobre si el Ayuntamiento tiene algún proyecto para aprovechar las cocheras. "En la actualidad se encuentran en uso, realizando su función, es decir, protección y guarda de los tranvías y de medios auxiliares vinculados al mismo", señaló el Ejecutivo que dirige Xulio Ferreiro, al tiempo que añadió que las instalaciones son un "espacio complementario" frente al que ocupa la antigua cárcel provincial, "un área prioritaria para dotar la zona de servicios".

El Gobierno local manifestó el pasado mes de junio que la decisión definitiva sobre la recuperación del tranvía dependía del informe económico y de viabilidad que aseguró que estaba elaborando la Compañía de Tranvías, concesionaria del servicio de transporte público colectivo. En la respuesta al PSOE no hace ninguna referencia al documento, se limita a exponer que su intención es "mantenerlo sin servicio".

Hace un mes Ferreiro negaba que el Concello diese "por desaparecido" el tranvía. "En el tramo entre castillo de San Antón y Torre de Hércules sería muy complicado volver a ponerlo en funcionamiento porque la catenaria ya no está y sería inversión de mucho dinero. Pero no lo descartamos en el tramo entre A Ribeira do Cómaro [Las Esclavas] y la Torre", explicaba.

El Gobierno local del PP ordenó en julio de 2011 la suspensión del servicio tras detectar daños en las vías, concretamente a la altura del edificio de Hacienda, en el Orzán, que podrían afectar a la seguridad. Los desperfectos fueron detectados por los técnicos municipales encargados del mantenimiento de las instalaciones después de que se registrase un leve descarrilamiento en el desvío del raíl en la zona del aparcamiento del paseo marítimo, a la altura del edificio de Hacienda. El servicio no volvió a ponerse en funcionamiento debido al elevado coste de reparación de las vías.