La distribuidora de frutas coruñesa Naranjas Ibáñez no ha conseguido superar el concurso de acreedores en el que se encontraba inmersa desde primavera de 2013. El Juzgado de lo Mercantil número 1 de A Coruña ha confirmado la extinción de la sociedad.

La resolución judicial fue publicada ayer en el Boletín Oficial del Registro Mercantil (Borme). En ella, se refleja "la conclusión y archivo por fin de la liquidación del proceso concursal voluntario" de la empresa, con sede social en Merca Coruña, en el polígono de A Grela Bens. El titular de la sala de lo Mercantil acuerda igualmente la "extinción de la personalidad jurídica de la deudora y el cierre de su hoja registral en el Registro Mercantil de A Coruña".

Naranjas Ibáñez es una de las empresas coruñesas que se ha cobrado la recesión económica. La situación le hizo entrar en concurso voluntario de acreedores en abril de 2013, tal y como hizo público el 22 de aquel mes el mismo juzgado de lo Mercantil. A partir de ese momento, las facultades de administración y disposición quedaron intervenidas mediante esta decisión.

Según figura en el Borme, la resolución judicial es firme y no cabe recurso alguno contra ella, tras aprobar el magistrado la rendición de cuentas de la Administración concursal, que cesa en el cargo al finalizar el proceso.

La empresa, dedicada al comercio al por mayor de frutas y verduras, contaba con una veintena de trabajadores. El concurso se da por concluido, según la información mercantil pública, por inexistencia de bienes. La firma tiene una amplia tradición en la ciudad con ventas muy importantes, también conocida por sus patrocinios deportivos.