El juez de guardia ha decretado prisión preventiva para cuatro hombres acusados de haber propinado una paliza a otro en la zona de fiestas del Orzán el pasado 24 de julio, en torno a las 04.00 horas de la madrugada. Cuando los agentes de la Policía Nacional llegaron a la zona se encontraron a un hombre tirado en el suelo, sangrando abundantemente por la boca, razón por la que procedieron a solicitar inmediatamente una ambulancia, que trasladó al agredido a un centro hospitalario, donde fue asistido de sus lesiones: fracturas en la mandíbula, pómulo y pérdida de prácticamente todas las piezas dentales.

La víctima se encontraba en ese momento acompañada de su pareja. Según la Policía, esta transmitió a los agentes que todo empezó cuando iban caminando por la calle y tuvieron un encontronazo con un par de jóvenes, golpe que les fue reprochado por su novio, sin más incidentes. "Sin embargo, esos dos jóvenes volvieron al lugar acompañados de otras personas, que sin mediar palabra tiraron a su pareja al suelo y comenzaron a darle golpes y patadas, hasta que al llegar en su auxilio varios transeúntes dejaron de golpearle y se dieron a la fuga", describen. Además, la pareja del agredido facilitó un teléfono móvil a los agentes, que le había sido entregado por un ciudadano testigo de los hechos y que, al verlo en el suelo, pensó que era de la víctima.

Los policías recogieron el terminal y comprobaron que en la funda había un DNI, el cual mostraron a la pareja del agredido y a uno de los testigos, que reconocieron en la fotografía a uno de los agresores, iniciándose la búsqueda.

La detención del primero de los agresores se produjo ese mismo día, en torno a las 06.00 horas, ya que él mismo se personó en comisaría para denunciar la sustracción de su DNI y su teléfono. El policía que le atendió, conocedor de la agresión, procedió a su detención inmediata. En ese momento, todavía presentaba restos de sangre en alguna prenda de ropa, así como marcas en sus manos y nudillos. La investigación policial continuó y llevó a la identificación de otros tres intervinientes, que fueron detenidos este jueves. La Policía afirma que son del "entorno" de los Riazor Blues y que uno de ellos participó en la pelea del Manzanares en la que fue asesinado un hincha coruñés.