El Partido Popular no tiene garantías de que el Gobierno local vaya a incluirlo en la ronda de negociación del presupuesto del próximo año, tras el fracaso en las conversaciones mantenidas para el actual. A pesar de todo, su portavoz, Rosa Gallego se plantea que las cuentas municipales de 2017 "beneficien a los ciudadanos, pongan en primer lugar a las personas, atiendan a todos los barrios por igual, generen empleo y caben con la parálisis de la ciudad a todos los niveles desde la llegada de la Marea". Para ello, Gallego reclama que los presupuestos sean "negociados, consensuados y aprobados en tiempo y forma", con el objetivo de que entren en vigor el primer día de 2017 y de este modo se evite lo que califica de "triste espectáculo" que a su juicio ofreció el Gobierno local este año.
Las prioridades que menciona el PP para el siguiente presupuesto son "el gasto social, la generación de empleo y la modernización y mejora de todos los barrios", ya que los populares se plantean que la ciudad "recupere su papel de referente del noroeste español" en materias como innovación, turismo, servicios sociales, acontecimientos deportivos y culturales, así como en planes de movilidad y accesibilidad. Gallego señala también entre sus objetivos la continuidad de los convenios municipales con entidades de todo tipo, uno de los asuntos que mayor polémica generó en la aprobación del presupuesto de este año, al votar PP y PSOE de forma coordinada en contra de la propuesta del Gobierno local.
El PP reclamará inversiones en todos los barrios para mejorar la accesibilidad, el aumento de fondos para rehabilitación y regeneración urbana y para instalar ascensores en viviendas, además de apoyo a los sectores hostelero, hotelero, turístico y comercial y que sirva para generar empleo. También pedirán los populares más recursos para cultura, educación y deporte, así como la reducción de partidas destinadas a externalizar servicios municipales y las dedicadas a publicidad y propaganda.
