El músico Bruno Couceiro ha denunciado el robo de "todos" sus platos de batería, que son, además, su herramienta de trabajo, ya que se dedica profesionalmente a la música. Los guardaba en la zona de Culleredo y, la noche del domingo al lunes, después de haberlos dejado sobre las tres de la madrugada, alguien forzó la entrada de su local de ensayo para llevarse solo los objetos metálicos.
Los ladrones se llevaron los platos de su batería, los calentadores de agua y algunas lámparas viejas que tenía guardadas en el almacén, a pesar de que contaba con material de más valor en el recinto. La víctima ha publicado en redes sociales las características del material robado, por si algún otro músico los reconoce en un escenario, aunque cree que, posiblemente, los ladrones hayan pensado en fundirlos y no en venderlos como instrumentos.
No es el único músico que, durante estos días, ha sufrido la sustracción de sus herramientas de trabajo. Hace dos semanas, la banda coruñesa Los Hot Chocolates, al volver de un concierto en Ribadavia y, al guardar el material utilizado en la actuación, se dio cuenta de que le faltaba una de sus cajas de material. Fuentes del grupo aseguran que bajaron la caja en Monte Alto, pero que nunca llegó a su destino. Contenía una mesa de mezclas Peavey y un micrófono de pinza de uno de los saxofonistas.
