La asociación vecinal de O Ventorrillo advierte de que la arena instalada en los alcorques de los árboles para evitar las caídas de los viandantes "están trayendo unos efectos inesperados". "Se están convirtiendo en urinarios caninos y que el viento hace una propagación de esos áridos afectando a los locales hosteleros próximos", denuncian. Piden al Concello soluciones para evitar las molestias.