Un conductor fue detectado por un radar de la Guardia Civil cuando circulaba a 178 kilómetros por hora con un turismo en un tramo de la tercera ronda con túneles en el que el límite de velocidad está fijado en 80 km/h. El automovilista, de nacionalidad portuguesa y residente en A Laracha, superaba en casi cien kilómetros por hora el límite máximo en este punto de la vía, en el término municipal de Culleredo, por lo que está siendo investigado por un presunto delito contra la seguridad del tráfico, informó ayer el instituto armado en un comunicado.

El conductor, de 22 años, está siendo investigado por el subsector de tráfico de la Guardia Civil. En caso de ser condenado por esta acción, se enfrenta a penas de prisión de tres a seis meses, multa de seis a doce meses o trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días. Independientemente de esto, también se le retirará el permiso de conducción de vehículos a motor y de ciclomotores por entre uno y cuatro años, según la Guardia Civil.

La velocidad alcanzada por este individuo supera ampliamente la velocidad máxima detectada por radar en la ciudad de A Coruña durante el año pasado, cuando un automovilista alcanzó los 146 kilómetros por hora. De los 1.461 conductores denunciados en 2015 por la Policía Local por exceso de velocidad, ninguno fue castigado con penas de prisión. El exceso de velocidad es, junto a la falta de atención o a la distracción al volante, la principal causa por la que ocurrieron accidentes de tráfico en el último año en la ciudad.

Este martes, un conductor fue denunciado por la Policía Local por dar positivo en la prueba de drogas, en un control preventivo de seguridad vial en el lugar de San José, a la altura de la refinería. Según informó el cuerpo municipal, el hombre, de 37 años, dio positivo en un test de saliva. El caso se ha remitido al juzgado.