Los pequeños Mudafar y Ahmed no serán acogidos finalmente en A Coruña. Su vuelo a España está previsto para finales de este mes, sobre el 24 de agosto -aunque la fecha puede sufrir modificaciones- con destino a Madrid. Una vez allí, será el Ministerio del Interior el encargado de hacer un seguimiento y de buscar una solución para esta familia que será acogida por la "extrema gravedad" de su situación.

Mudafar y Ahmed tienen diez y nueve años y ambos sufren enfermedades hepáticas. Proceden del Kurdistán iraquí, aunque su familia se trasladó al campo de refugiados de Katsikas, en Grecia, en busca de un futuro mejor y huyendo de la guerra y de una muerte casi segura. Allí, donde las temperaturas son extremas y no existían las camas, solo las piedras, los conocieron los voluntarios de la ONG Axuda Integral Rescate Emerxencias (AIRE), integrada en su mayoría por Bomberos de los parques comarcales y de A Grela y sanitarios.

Al conocer su caso, la Concejalía de Igualdade e Diversidade de A Coruña y la ONG iniciaron una campaña para sacar a los pequeños y a su familia del campo de Katsikas y para frenar el reloj que iba en contra de su vida, ya que las condiciones en las que estaban obligados a residir se hacían incompatibles con la mejoría de su salud. Ambos sufrían malnutrición y carecían de las condiciones sanitarias e higiénicas necesarias para no empeorar, así como de un tratamiento adecuado para contraatacar sus males. Desde hace algo más de un mes viven fuera del campamento, primero se mudó a un hotel en Tesalónica y, más tarde a un piso en Atenas.

El Complexo Hospitalario Universitario A Coruña incluso se ofreció a tratar a los pequeños y a hacerles un estudio genético que vertiese luz sobre su enfermedad. En principio, no se cumplirá su plan. La concejal de Igualdade e Diversidade, Rocío Fraga, explicó ayer a este diario que la familia viajará "por la vía de urgencia" a España y que será el Ministerio del Interior el que se haga cargo de su realojo. "Nosotros teníamos médicos y un piso para esta familia, pero como no está en la lista de las residencias para refugiados, no valía. No queremos hacer acogidas a la carta, pero con el caso de Mudafar y Ahmed demostramos que es una cuestión de voluntad y de que si se quiere, se puede", comentó la edil, que asegura que el Concello seguirá "involucrándose" para que los refugiados tengan una vida mejor.

"Mantenemos contacto directo con las entidades que están trabajando en los campos de refugiados, así que, en unos quince días, iniciaremos una campaña de recogida de material para enviarles. Diremos qué necesitan y recogeremos solo esos artículos. Es más efectivo", resumió Fraga. Habrá varios puntos de recogida en la ciudad y se solicitarán conservas que no contengan cerdo, así como material escolar.

El Concello plantea también la creación de una mesa de trabajo para gestionar las ofertas que, a diario, recibe la concejalía para ayudar a las familias refugiadas. "Hay gente que se ofrece a dar un concierto para recaudar fondos, que está muy bien, así que, podemos coordinarnos para hacer un acto grande, que consiga reunir más recursos", dijo Fraga.