El Concello volvió a desplegar un dispositivo especial en las playas por las mareas vivas. Se cerró sin incidencias. La pleamar estaba prevista para las seis, pero la afección de las olas fue menor que en la jornada anterior. El área de Seguridade recuerda a la población que, ante estas situaciones, debe extremar la precaución y seguir las indicaciones del servicio de socorrismo. En la playa de Orzán ondeó la bandera amarilla y en la playa del Riazor, la bandera roja, con prohibición de bañarse.