Hubo un tiempo en que en los campos de Eirís se cultivaban las fresas que para muchos eran las mejores de la comarca coruñesa, hasta el punto de que la fiesta anual del barrio se celebraba en un lugar conocido como el Campo de la Fresa. Aquel lugar desapareció hace unos años engullido por el parque ofimático, pero los vecinos conservan la celebración, a la que denominan como Fiesta de la Fresa, ya que en ella se reparten entre los asistentes estas sabrosas frutas. Las distribuidas ayer en los festejos de Eirís eran procedentes de Abegondo, pero se consumieron con la misma avidez, incluso por los políticos que se dejaron ver por el lugar.
El parque del barrio acogió desde primera hora de la tarde talleres ambientales sobre bombas de semillas y avistamiento de aves, además de un torneo de fútbol entre el Eirís y el equipo Par da Chave. La degustación de las fresas fue amenizada con la interpretación de música tradicional a cargo de un grupo, tras lo que los niños pudieron asistir al concierto de Paco Nogueiras y a la función de cuentacuentos de A Trastenda dos Contos.
La actuación del grupo folk Oima precedió por la noche a la verbena celebrada en el parque, en la que se contó con la actuación de la orquesta Los Satélites.
Pedralonga será el sábado el último barrio en celebrar sus fiestas dentro del programa municipal de agosto. El aparcamiento de la Fábrica de Armas será el lugar en el que se desarrollen los actos, que culminarán con un concierto de la orquesta Bluestar.
Los festejos de María Pita concluirán el fin de semana con la romería de Santa Margarita, que además de en el parque del mismo nombre este año se desarrollará el sábado en otros puntos de la ciudad, donde se organizarán talleres y actuaciones musicales.
