Los grupos municipales encaran el reinicio de la actividad política en el Concello con visiones muy diferentes de lo que puede suceder en los próximos meses. Por parte de Marea Atlántica, su portavoz y alcalde, Xulio Ferreiro, destaca que este nuevo curso será el de la puesta en marcha de la Renta Social Municipal, medida a la que califica de "completamente histórica" y cuya aplicación considera "inmediata", por lo que cree que será una de las señas de identidad de este nuevo periodo.

Pero Ferreiro destaca además que en los próximos meses el Gobierno local pretende "avanzar en las políticas dirigidas a afianzar una nueva movilidad" y asegura que durante los últimos 14 meses se ha realizado un "ingente trabajo preparatorio" con el que se quiere dar prioridad al peatón y humanizar las vías de circulación. "Comenzaremos por la redistribución de las líneas de bus, además de la puesta en marcha de numerosos proyectos que tratarán de dar una alternativa al coche particular", afirma, tras lo que incluye entre las actuaciones a desarrollar la estación intermodal la remodelación de Alfonso Molina, y la red de carriles bicis y sendas ciclables.

En el campo de la vivienda, Marea Atlántica prevé aumentar el parque municipal y la rehabilitación de edificios en ruinas, así como conseguir "la mejor solución" al problema del parque ofimático. La recuperación de espacios públicos en todos los barrios será la prioridad en materia urbanística, mientras que los mercados serán considerados "núcleos estratégicos" para la economía y la dinamización de los barrios mediante "propuestas de actividades que amplíen su carácter comercial" y actuaciones integrales en sus instalaciones, como las previstas en Monte Alto, Adormideras, San Agustín y Santa Lucía.

Para la portavoz del PP, Rosa Gallego, el arranque del nuevo curso se produce con un "alcalde ausente", a quien reprocha que se haya ido de vacaciones sin negociar una modificación del presupuesto "rechazada por toda la oposición". Gallego no teme que la convocatoria de las elecciones autonómicas y la convulsión política nacional afecten a la vida municipal. "Llevamos con elecciones generales desde diciembre y es un tema que está en Madrid y que a nivel municipal no tiene por qué afectar", opina sobre esta cuestión, al tiempo que advierte de que la negociación del presupuesto "tenía que haber empezado hace meses", pero que "absolutamente nadie" se ha puesto en contacto con el PP, al que tampoco se ha aportado "ninguna documentación". "Me temo que va a pasar lo mismo que el año pasado, que no estarán aprobados el 31 de diciembre", alerta Gallego, quien acusa al Gobierno local de estar "centrado en cosas que no tienen que ver con la ciudad".

El objetivo del PP es que en 2017 haya unos "presupuestos consensuados" y que estén aprobados "en tiempo y forma". La jefa de filas de los populares exige además que estas cuentas "prioricen el gasto social y que generen empleo, que modernicen todos los barrios y que recuperen el papel de A Coruña como referente del Noroeste español".

Tampoco los socialistas creen que la situación política externa afecte a la relación entre los partidos en el Concello. "Siempre hemos mantenido la autonomía de la labor municipal", proclama el portavoz del PSOE, José Manuel Dapena, quien a principios de agosto entregó al Gobierno local una propuesta de marco negociador del nuevo presupuesto en la que se reclamaba un balance sobre el acuerdo suscrito entre su grupo y el de Marea a principios del mandato que a su juicio "tiene flecos que cumplir".

Los socialistas exigen además datos sobre la ejecución de las enmiendas que presentaron al presupuesto actual y confían en abrir en los próximos días la negociación sobre las cuentas de 2017. "Espero que no se llegue a los errores que cometió la Marea en 2015 y que provocaron el retraso del presupuesto de este año", afirma Dapena, quien vaticina un resultado satisfactorio "si hay ánimo de negociar y no de imponer". El portavoz del PSOE califica de "fracaso" el enfrentamiento mantenido por el Gobierno local con su grupo, del que considera que "el único beneficiado ha sido el PP". Pese a que los acuerdos sobre la renta social y el vivero de empresas del Papagayo apuntaban un cambio de rumbo por parte de Marea, Dapena alerta de "chirridos" como la falta de negociación de la modificación del presupuesto de este año.

"Es necesario comenzar cuanto antes la negociación de los presupuestos", reclama la portavoz del BNG, Avia Veira, quien exigirá incrementos en los servicios municipales, reducir las externalizaciones y que las propuestas de los presupuestos participativos se plasmen en las cuentas. En materia fiscal, Veira propone reducir las tarifas del agua al nivel anterior a 2012 y que el recibo de la basura se adapte al tratamiento real que se le da.

El BNG insistirá además en la revisión de la concesión a la Compañía de Tranvías y de la fórmula con la que se calcula el precio del billete, la recuperación del carril bus y la implantación de un "verdadero Plan de Movilidad". Veira propone una "reforma integral de la ORA" que aproveche mejor el espacio público y modifique su funcionamiento actual.