El Gobierno local señala que la posibilidad de que los vecinos paguen si emiten denuncias falsas o de ámbito privado en el Servicio de Sugerencias y Reclamaciones no está encima de la mesa. En la Memoria de Gestión de 2015 -año electoral compartido por los ejecutivos de PP y Marea Atlántica- los responsables técnicos del área de Inspección Ambiental advierten del exceso de trabajo sobre sus hombros y proponen, entre otras medidas para aligerarlo, establecer una serie de tasas para aquellos vecinos que hagan un uso fraudulento del servicio del 010, concretamente para aquellos que lo utilicen de manera "temeraria, infundada" o con asuntos "de naturaleza estrictamente privada".

El Ejecutivo manifiesta que es una propuesta interesante pero descartan que esté en agenda. El PP aprovechó la sugerencia del departamento municipal para cargar contra el Ejecutivo de Xulio Ferreiro. al que acusan de "amenazar con multar a los coruñeses por usar el 010 para quejarse de los graves problemas de suciedad". Sobre lo escrito en la memoria, interpretan que, "por primera vez en la historia, un alcalde quiere sancionar a los vecinos". El Gobierno replica que, "al contrario que multar por las quejas como hacían ellos en la Torre o con los desahucios", ellos "crean fórmulas como el Dillo Ti para que la gente se queje directamente".