La creación de Lugrís fue extraída utilizando la técnica de stacco a massello, que consiste en arrancar el soporte físico sobre el que se encuentra la pintura mural con el fin de causar el menor daño y modificar lo menos posible el aspecto de la obra para respetar al máximo su contexto. El próximo paso antes de exponer el mural consistirá en la instalación de este en su nuevo espacio, que estará bastante próximo a su lugar de origen al situarse en la calle Olmos.