La planta de Nostián se beneficiará de unas obras que pretenden mejorar la separación mecánica de envases, una inversión pactada con Xunta y Ecoembes, después de que esta entidad -constituida principalmente por los productores de envases- decidiese reducir el canon que paga a A Coruña y su área por los residuos que recuperan. La concejal de Medio Ambiente, María García, valora los acuerdos para compensar a la ciudad alcanzados con la Xunta en la reunión del jueves, entre los que destaca que el Gobierno gallego le enviará un borrador del convenio con Ecoembes antes de firmarlo.

Este convenio tendrá como consecuencia una bajada de los ingresos para Nostián, porque Ecoembes ha decidido hacer desaparecer las aportaciones por determinados tipos de plásticos. La Xunta negoció con la sociedad una serie de compensaciones que al Concello le parecían insuficientes. Tras la reunión del jueves con representantes de las tres partes, ha quedado perfilado de mutuo acuerdo cómo será dicha restitución.

En primer lugar, el Concello saluda que se le consulten las obras que se harán en la planta de Nostián. Según explica la edil de Medio Ambiente, María García, abordarán la instalación de unos dispositivos que mejoren la eficiencia de las líneas en las que se seleccionan y separan de forma mecanizada los restos de diferente naturaleza que llegan del contenedor amarillo para su reciclaje (latas, bricks...). Los trabajos se harán una vez sellado el convenio, para cuya firma no hay fecha.

Por otro lado, la concejal destaca que se recuperará para este convenio una cláusula del primer convenio entre Gobierno gallego y Ecoembes 2000 que nunca llegó a hacerse efectivo por el que la sociedad de fabricantes de envases se comprometía a pagar por el cartón que se "cuela" en los contenedores amarillos. Estos envases de cartón entran en los biodigestores y en el proceso de compostaje y valorización energética. "A Sogama se le está pagando por meter estos envases en incineración y creíamos que era coherente que se nos pague a nosotros también, aunque el proceso de valorización sea diferente", razona García. Son solo los del contenedor amarillo, aclara. Los del azul no entran ya en la cadena de separación ni en los biodigestores, sino que van directamente a reciclar, por lo que dan más ingresos. "Por eso es tan importante que la gente use el contenedor azul, ahorra muchísimo dinero", advierte. En 2015, los residuos recogidos en estos depósitos reportaron 97.206 euros. A esto hay que añadir la recogida específica en los establecimientos comerciales, que supusieron 53.035 euros.

La concejal indica que quieren que el próximo año se empiece a notar una mejora en los hábitos de reciclaje del ciudadano. Cada año, argumenta, la recuperación reporta siete millones de euros. "Hay que volver a hablar de residuos en esta ciudad, en positivo, no podemos solucionar todos los problemas en la planta", razona. Por eso, además de mejoras técnicas, la Xunta financiará campañas de sensibilización porque, a su entender, hace falta reinformar a los vecinos: "La gente está influida por la propaganda en el resto de Galicia, con un modelo contradictorio con Nostián".