Ensanche y Cuatro Caminos son las zonas en las que los delincuentes que el pasado mes de agosto entraron a la fuerza en casi un centenar de comercios y oficinas de la ciudad actuaron con más frecuencia. Hasta 18 de los 95 asaltos registrados ese mes ocurrieron en diferentes calles del Ensanche, como Juan Flórez, Juana de Vega, Cabo Santiago Gómez o Francisco Mariño, según recogen los datos de la Policía Nacional a los que ha tenido acceso este periódico. En Cuatro Caminos hubo 14, en vías como Fernández Latorre, Concepción Arenal o Alcalde Marchesi.

Los ladrones, que en la mayoría de los casos se llevaron pequeñas cantidades de dinero y algunos objetos de valor de cafeterías, bares, peluquerías, joyerías, librerías, oficinas o almacenes, escogieron otras 15 zonas de la ciudad -además de un dos polígonos industriales y el puerto- para acceder a los locales forzando puertas o verjas y cometer golpes. Hubo 11 en Pescadería, 8 en el Agra do Orzán, 7 en O Ventorrillo y 5 en O Castrillón. Fueron más escasos los asaltos de agosto en Elviña, Monelos, Eirís, Sagrada Familia, Os Mallos, Riazor, Os Castros, Gaiteira, Ciudad Vieja, Monte Alto y Os Rosales.

Fuentes sindicales del 091 señalan que ha cambiado perfil de los asaltantes (en septiembre se han registrado ya más de una decena). Dicho perfil encaja con el delincuente con antecedentes que reside en la ciudad, a diferencia de la oleada estival de 2014: pertenecían a bandas organizadas, de paso en la ciudad y de Europa del Este, y su objetivo eran pisos, sobre todo en los barrios. En lugar de robar de noche, como este verano, aprovechaban las horas de ausencia de los inquilinos. Los efectivos policiales investigan si los ladrones trabajan de forma aislada o en grupo con métodos coordinados. Según los datos de agosto, en un mismo día se produjeron hasta 10 asaltos, y en otros dos días hubo 7 en distintos barrios.

La alarma creada por esta ola de robos en oficinas y locales comerciales en toda la ciudad ha provocado la preocupación de los vecinos, de la Corporación local y de los propios agentes. El PSOE local exigió ayer a Interior una "respuesta inmediata" frente a esta sucesión de delitos en tan poco tiempo y propuso la convocatoria de la Junta Local de Seguridad.

Desde el sindicato CEP la reclamación se dirige a la Comisaría Provincial de A Coruña y apunta a la reconfiguración del sistema de trabajo después de que desde el pasado abril se modificasen en toda España los horarios laborales. El secretario regional en Galicia del CEP, Fernando Patiño, pide la instauración del horario nocturno para cierta parte del personal con el fin de suplir la carencia de efectivos ahora existente, uno de los motivos, según explican los sindicatos policiales, de que aumentasen los robos por las noches a comercios y oficinas el mes pasado. En septiembre se mantiene la tendencia delictiva. Entre las madrugadas del lunes y el martes fueron forzadas las puertas de once despachos de negocios y una vivienda en Juana de Vega y Compostela, de nuevo en el Ensanche, la zona favorita de los ladrones.