Quizás porque son los únicos a quienes depararon alegrías, el PP sigue a vueltas con el resultado electoral del pasado domingo. La portavoz popular, Rosa Gallego, llamó al alcalde, Xulio Ferreiro, y al portavoz del PSOE, José Manuel Dapena a hacer "autocrítica" y "reflexionar" acerca de lo que ella considera "mal resultado" para la izquierda.

A juicio de la conservadora, los resultados de las elecciones autonómicas tienen una extrapolación a la vida política local. "Es un clamor popular que la ciudad está paralizada, hay más suciedad, no hay policía de barrio, hay más paro y no se paga a los proveedores", señaló Gallego en un comunicado.

Ferreiro quitó el lunes hierro ante una posible repetición del resultado en unas locales. "No se presentó la Marea Atlántica ni tampoco yo", señaló. Si se calcasen las votaciones en los comicios municipales, el PP pasaría a tener 13, Marea siete , el PSOE cinco y el BNG dos, lo que seguiría permitiendo un gobierno de izquierda.