La radiografía del mercado laboral en la ciudad de A Coruña revela que entre la población joven -hombres y mujeres con edades comprendidas entre los 16 y los 29 años- que en la actualidad están en situación de paro o son demandantes de empleo casi la mitad no tiene la titulación de la enseñanza secundaria obligatoria. Según los datos públicos de afiliaciones en alta laboral en la Seguridad Social y del paro registrado que maneja el observatorio sociolaboral del área de Emprego e Economía Social del Concello, 2.249 residentes menores de 30 años carecen de empleo, de los que 1.086, un 48,2%, tienen un nivel de formación académica elemental y a los 12 o 13 años no comenzaron a cursar la ESO.

Este es uno de los datos sobre la situación laboral de jóvenes coruñeses de 16 a 29 años que incluye un informe en el que se ha basado el Gobierno local para licitar la contratación de un servicio de consultoría que elabore un Plan de Empleo Juvenil del Concello, un documento con el que pretende combatir la alta tasa de desempleo y la precariedad laboral que afectan a este sector de la población.

EPoblación activa. La suma de los coruñeses de entre 16 y 29 años integrados en el mercado laboral que trabajan y que demandan empleo es de 10.798 personas: 8.549 ocupados con afiliación a la Seguridad Social y 2.249 registrados en el paro. La tasa de desempleo en este tramo de población es del 20,8%. En la ciudad, según el último padrón municipal, hay 29.084 residentes menores de 30 años, de los que el 37,1% -esos 10.798- están en el mercado de trabajo mientras que el resto, aunque ya está en edad de trabajar, continúa su formación.

ENivel académico. Cuanto más básicos sean los estudios acreditados más difícil es obtener un empleo. No es extraño que esta creencia escape de la lógica, aunque los datos de la Seguridad Social descubren que aquellos jóvenes coruñeses en situación de paro que terminaron de estudiar prematuramente y solo recibieron un certificado de escolaridad son bastante más numerosos que los que acabaron la ESO, cursaron Formación Profesional o Bachillerato Superior u obtuvieron una titulación universitaria. Casi la mitad, 1.086 no pasaron por la enseñanza obligatoria, frente a los 344 que sí concluyeron la ESO, los 300 que hicieron FP, los 167 que acabaron el Bachillerato y los 350 que finalizaron su formación en la Universidad.

EParo por tramos en edad juvenil y por sexo. A medida que cumplen años los jóvenes coruñeses desempleados de entre 16 y 29 años parece más complejo encontrar ocupación. La mitad de los 1.086 parados menores de 30 con baja cualificación, 527, tienen entre 25 y 29 años, y son tantos hombres (263) como mujeres (264). En el polo de formación opuesto, se produce una situación parecida: de los 350 titulados sin empleo, 310 tienen más de 25 años, si bien las mujeres (205) duplican a los hombres (105).

EParo por actividad económica. El comercio o la reparación de vehículos y la hostelería son los sectores laborales con más coruñeses en edad juvenil registrados en el paro, 361 y 330, respectivamente. Solo es superior el número de desempleados jóvenes, 633, que buscan su primer empleo. Las actividades administrativas y los servicios auxiliares (209 demandandes) y las ocupaciones científicas o técnicas (123) son los siguientes sectores en los que los parados menores de 30 años tratan de encontrar trabajo. Las industrias extractivas y las actividades de suministro de energía o gas no atraen en la actualidad a ningún demandante de empleo.

EParo juvenil por sexo y actividad. Los parados registrados jóvenes de la ciudad demandan más actividades administrativas, del sector de la construcción, el transporte y de la industria manufacturera que las mujeres, quienes son mayoría al buscar empleos en la rama sanitaria y de los servicios sociales, el comercio y las actividades científicas o técnicas. Hay menos diferencias entre quienes anteriormente no tenían ningún trabajo, 323 parados y 310 desempleadas.

EAbandono educativo. El informe del observatorio sociolaboral del Concello refleja que la renuncia de los jóvenes a completar sus estudios en el conjunto de la comunidad gallega explica que casi la mitad del paro juvenil en A Coruña corresponda a residentes que no completaron la primera etapa de su educación académica. Es un comportamiento que afecta sobre todo a los chicos y chicas de entre 18 y 24 años. En 2014 -hasta cuando se dispone de datos- es superior en los gallegos (21,7%) que en las gallegas (15,2%), aunque catorce años atrás, en 2000, los porcentajes eran superiores.

EUn plan laboral para los jóvenes. El Gobierno local licita por 18.000 euros la elaboración en dos meses del contenido de un Plan de Empleo Juvenil que contenga un diagnóstico de la situación laboral de los jóvenes y estrategias y objetivos para la puesta en práctica de acciones que reduzcan el desempleo en el sector y la precariedad laboral.