Varios vecinos se pusieron en contacto con la Policía Local para denunciar un fuerte olor en los barrios de Riazor, Labañou y San Roque, lo que hizo que se desplazase una patrulla al lugar. Los agentes averiguaron que se debe al abono del nuevo césped del estadio, que lleva instalando el club en las últimas dos semanas aprovechando el parón de liga y el partido fuera de casa. El uso de restos orgánicos, informa el Concello, causó el hedor.