Una inspección rutinaria de la red de saneamiento que se realizaba en Cuatro Caminos permitió descubrir ayer por la mañana una rotura en la canalización del río de los Judíos, el arroyo que nace en Vioño y desemboca en el puerto, que hacía correr el riesgo de un hundimiento de la calzada. El problema fue localizado en el cruce de las calles Doctor Enrique Hervada y Fernández Latorre, entre la antigua cafetería Remanso y el Banco Pastor, un punto con gran intensidad de tráfico, por lo que la concejalía de Rexeneración Urbana puso en marcha una intervención urgente para reparar la conducción.

Los trabajos que se realizan desde la tarde de ayer obligan a dejar solo un carril de giro hacia Doctor Enrique Hervada desde Fernández Latorre y otro más hacia el centro de la glorieta. Estas restricciones afectaron ayer a la circulación en el entorno de Cuatro Caminos en las horas punta, ya que se formaron retenciones en la avenida de Oza en el sentido desde A Gaiteira hasta el parque Europa, mientras que desde el centro alcanzaron la avenida Primo de Rivera. El Gobierno local aconseja eludir el paso por Cuatro Caminos mientras continúen las obras y propone como alternativas la avenida del Ejército, Ramón y Cajal, Alcalde Pérez Ardá, Marqués de Amboage y Caballeros.

El río de los Judíos pasaba antiguamente por Os Mallos y, tras ser entubado, pasa ahora por el centro de la glorieta de Cuatro Caminos. El concejal de Rexeneración Urbana, Xiao Varela, destacó que la rotura de la canalización fue descubierta antes de que el suelo se desplomase, por lo que resaltó la " relevancia de los trabajos de inspección, conservación y mantenimiento" de los servicios urbanos, tanto para el normal funcionamiento de la ciudad como para la prevención de accidentes.

El edil explicó que, al salirse de la canalización, el agua del arroyo arrastró la arena que la cubría la canalización y creó "una caverna interior de considerable tamaño", por lo que se excavará hasta llegar al nivel del río, situado a cuatro metros bajo la calzada, Varela detalló que existen dificultades técnicas porque habrá que salvar varias conducciones de servicios y un pozo de saneamiento en la zona, tras lo que luego habrá que reconstruir la tubería dañada con piezas de hormigón.