El grupo municipal del BNG, crítico por tradición con la concesión de la Compañía de Tranvías, mostró ayer su malestar por la decisión del Gobierno de Marea de prorrogar dos años el servicio con la adjudicación directa a la propia concesionaria, tras considerar que se extingue hoy. Los nacionalistas reclaman de nuevo la gestión pública del servicio de transporte urbano y critican al Ejecutivo local por atender a la petición de la empresa de llevar a Bruselas la consulta sobre la duración de la concesiónconcesión.

"El Goberno municipal, ni con la extinción de la concesión a fecha de 1 de diciembre de 2016, prorrogada hasta 2018, no en caso de entender la Comisión Europea que la duración del contrato deba extenderse hasta 2024, no está garantizando mejoras cualitativas en el servicio, los horarios, frecuencias, precios o líneas que hoy se les ofrecen a los ciudadanos ni cambiando las condiciones leoninas de la concesión", denuncian en un comunicado.

El BNG defiende que el Concello gestione de forma directa el transporte público o "a través de la adjudicación de contratos de servicio público a una entidad jurídicamente independiente sobre la que la autoridad local competente ejerza un control análogo al que ejerce sobre sus propios servicios".

Los otros dos grupos de la oposición se mostraron cautelosos respecto a la concesión de Tranvías y la decisión del Gobierno de Marea de prorrogar dos años el servicio a la misma empresa. Tanto el PP como el PSOE prefieren esperar a que se pronuncie la Comisión Europea sobre la consulta que les remitirá el Concello. Los populares criticaron que tuvieran acceso un día antes al expediente sobre la concesión que hoy se aprobará en la Junta de Gobierno Local.