La Fundación Jorge Jove considera que la parcela que le ofrece el Concello en A Grela para levantar el Museo de la Automoción "no sirve", ya que incumple sus expectativas de espacio. "Por mucho cariño que le pongamos, ni conceptual ni expositivamente hay forma humana de reducir un proyecto con unos criterios de excelencia a 7.100 metros cuadrados", explicó ayer el presidente de la fundación, Ángel Jove, que seguirá apostando por ejecutar el proyecto en el parque de Bens, aunque modificando el diseño de 2015.

La fundación propone al Concello quedarse en el parque a cambio de eliminar la zona técnica -con circuitos y distintos pavimentos para hacer pruebas-, ya que cree que la puede ejecutar en otra parcela fuera de Bens; de abrir un espacio, dentro de los terrenos que se cedan a la fundación, para que los perros puedan estar sueltos y de que todos los usuarios del parque puedan tener acceso a la cafetería del museo con sus canes. Este local tendría, además, un aparcamiento específico para las bicicletas. La entidad, según explica Jove, aprobó este domingo la propuesta y espera a que el Concello se pronuncie sobre ella.

El Concello defendió el pasado miércoles que la parcela de A Grela es un "lugar de oportunidad" y suficiente para el museo porque su edificio, según el Concello, ocuparía 6.600 metros cuadrados, una cifra que Ángel Jove asegura no saber "de dónde ha salido". Para la fundación, Bens es la solución más rápida y "en la que más se ha avanzado". Según explica Jove, la parcela es de la fundación hasta 2090 y solo se necesita "realizar una modificación puntual que tiene que aprobar la Xunta" para realizarlo con las alturas proyectadas, porque hay 20.000 metros cuadrados que tienen ya un uso dotacional recogido en el plan general.

En el horizonte de la fundación no entra reducir, como ya lo había hecho en 2015 sobre el proyecto inicial de 2009, el espacio del museo, ya que, según asegura Jove, eso significaría tocar dos partes que no están dispuestos a sacrificar "la expositiva y la de la formación". Sobre el "no" de Marea al museo en Bens, el presidente, Jove dice que se debe "al desconocimiento" del proyecto que cuenta con otras instalaciones adyacentes bautizadas como "pista test", un circuito de más de un kilómetro de trazado, en el que prevé poner a punto los vehículos que forman parte de la muestra; una "zona técnica", con diferentes tipos de firmes; "a rúa e os neniños", un espacio para que los niños de entre dos y doce años aprendan seguridad vial jugando; y la "zona all road", con obstáculos naturales para la práctica del ciclismo, para la conducción de quads y 4x4.

"Con el segundo proyecto, de 2015, redujimos la edificabilidad en un 25%, pero aún así son más de 30.000 metros cuadrados para el edificio", explica Jove. Y es que el Museo de la Automoción se empezó a fraguar en 2009, con el apoyo de PSOE y BNG que, para entonces, estaban gobernando en coalición. Este primer proyecto contaba con más de 40.000 metros cuadrados y se redujo en 2015 para que el edificio no fuese "tan mamotreto" y para modificar también las "instalaciones complementarias", ya que este primer boceto ocupaba la parte de las cascadas.