La venta de los terrenos de La Solana y el hotel Finisterre, el futuro de los muelles de Batería y Calvo Sotelo cuando su actividad se traslade al puerto exterior, la cesión de los terrenos de la Marina a la Administración local y la conexión ferroviaria a punta Langosteira son los asuntos que tratarán en persona el alcalde, Xulio Ferreiro, y el presidente de Puertos del Estado, en una reunión prevista para dentro de "pocos días", según apuntan fuentes municipales.

Esta agenda de trabajo la avanzaron ayer Ferreiro y Llorca en una conversación telefónica que mantuvieron un día después de que el mandatario de la institución estatal expresase su disposición a buscar soluciones sobre la venta de La Solana y el Finisterre, cuya subasta aprobó reanudar el pasado 22 de diciembre la Autoridad Portuaria contra el interés del Gobierno local de obtener los terrenos por 1,4 millones de euros. El contacto telefónico se desarrolló en un clima de "cordialidad y bastante entendimiento", de acuerdo con las mismas fuentes, y solo falta concretar cuándo se fijará el encuentro.

Llorca había apoyado a finales del año pasado un informe de Puertos del Estado que respaldaba la celebración de la puja después de que la concesionaria del hotel y del complejo deportivo, Río Mero, se comprometiese con la Autoridad Portuaria el 6 de octubre a ofertar 10 millones de euros por las parcelas. El presidente de la Autoridad Portuaria, Enrique Losada, cerró ese acuerdo antes de que finalizase, el 31 de diciembre, el plazo para que el Concello presentase su propuesta de compra. Ahora, con la aprobación en el último pleno de una moción del PSOE apoyada por el PP -además de Marea y BNG- que reclama la titularidad pública de estos terrenos, Llorca se muestra dispuesto a encontrar soluciones en la próxima reunión con el alcalde.

Esta operación en La Solana y el Finisterre, cuya concesión concluye en 2027, ha provocado el último enfrentamiento entre el Ayuntamiento y el Puerto. El Gobierno local quiere que la parcela tenga un nuevo uso para los ciudadanos y pretende comprarla de forma directa por 1,4 millones de euros, el precio en el que lo tasó la entidad portuaria, partidaria ahora de ingresar una cantidad mayor con la oferta privada comprometida con la inmobiliaria Río Mero.

Está pendiente de avances la negociación por el desarrollo urbanístico por la venta de los muelles de Batería y Calvo Sotelo, por los que el Puerto prevé ingresar 25 millones entre este año y el próximo. El Ejecutivo de Marea también proyecta un uso público de la zona, condición con la que se comprometió el Puerto hace un año.

La Marina es otro escenario abierto. El Gobierno local y el Puerto aún no han terminado de tramitar la cesión de los terrenos donde el Concello, como próximo titular, cuenta con poner en marcha obras para mejorar la zona. El tren a Langosteira también se incluye en la agenda ante el retraso que recae sobre la infraestructura, para la que Puertos ha reservado hasta 2021 solo 1,1 millones de la inversión total de 101,1 millones que prevé.

Llorca visitó la ciudad a final de marzo de 2016 para tratar de poner fin a las discrepancias entre el Puerto y el Concello por el futuro de los muelles. Su presencia sirvió para acercar posturas que nueve meses después, con los terrenos portuarios como motivo, han vuelto a colisionar.