El acusado de lanzar un vaso de cristal a la cara de una mujer en el interior de un pub de la ciudad sobre las cuatro de la mañana del 21 de febrero de 2014 reconoció ayer los hechos ante el tribunal de la Audiencia Provincial. El abogado del sospechoso llegó a un acuerdo con la Fiscalía sobre la pena, por lo que el imputado aceptó no ir a juicio y ser condenado a un año y medio de cárcel y a pagar a la víctima una indemnización de 6.500 euros. El sentenciado, que carece de antecedentes, no ingresará en prisión. El Ministerio público solicitaba que fuese penado con cuatro años y medio de cárcel y que abonase a la mujer 2.495 euros.

La afectada requirió de una primera asistencia médica y tratamiento. Como secuela le quedó una cicatriz de 4,5 centímetros en la cara que le ocasiona, según la Fiscalía, "cierta deformidad". Para curar de las heridas necesitó 12 días, de los cuales 8 estuvo de baja laboral.