Los datos obtenidos por el Plan de Urbanidad de la avenida de Alfonso Molina, encargado por el Concello a la cooperativa Partidarios da Cidade, reflejan que el tramo entre la fuente de las Pajaritas y el desvío a Pocomaco registra una media anual de 15 accidentes de tráfico. El informe recabó los siniestros contabilizados por la Policía Local, cuyo límite de intervención es el punto donde se encuentran los enlaces con Pocomaco y Matogrande, entre el 1 de enero de 2014 y el 17 de octubre de 2016, que sumaron 45, de los cuales 21 fueron en dirección salida de la ciudad y 24 en dirección de entrada.
Estos accidentes motivaron la apertura de atestados por los agentes municipales en el tramo que se encargan de controlar, a los que hay que sumar otros cuatro ocurridos en la zona vigilada por la Guardia Civil de los que la Policía Local tuvo constancia. En la mayoría de los siniestros hubo un solo vehículo implicado, ya que se trataron de 33 casos de salidas de la calzada.
Contrariamente a la creencia popular, las colisiones entre dos o tres vehículos son infrecuentes, ya que solo se contabilizaron diez casos a lo largo de casi tres años de análisis. Es destacable sin embargo que hubo seis casos de daños en vehículos causados por la presencia de elementos extraños en la calzada, como ruedas, adoquines o tubos de escape.
La Policía Local documentó un total de 104 incidencias en la avenida en el periodo estudiado, entre las que figuran limpiezas de la calzada, daños en instalaciones públicas, ocho casos de vehículos averiados en la calzada o en el arcén, seis casos de aparición manchas de aceite o barro en el pavimento, así como intervenciones de los agentes para colaborar con los servicios de mantenimiento de zonas verdes y de limpieza viaria, así como para la colocación de vallas publicitarias.
Los problemas con elementos públicos como señales, farolas o alcantarillas generaron cinco incidencias, mientras que hubo cinco casos de presencia de animales vivos o muertos en la calzada. Las manifestaciones o concentraciones a las que acudieron los agentes en este periodo fueron cuatro, tres de ellas organizadas por los vecinos afectados por el proyecto del parque ofimático.
