Vikingos, payasos, cardenales y otros cargos eclesiásticos, piratas y sirenas, tribus urbanas, indios americanos, venezolanos y venezolanas engalanados con las vestimentas tradicionales del país y otros grupos disfrazados con trajes rocambolescos de difícil o imposible descripción formaron parte de algunas de las carrozas del desfile de Carnaval de ayer por el centro de la ciudad. El primer premio fue para la comparsa Kilomberos en la categoría de vestuario y coreografía y para Os Mesmos de Sempre, con la propuesta Vuela con Os Mesmos, en la modalidad de carrozas.

Los ganadores se embolsaron 1.500 euros. Los segundos premios fueron para Pantaleón por partida doble y los terceros, para Los Infieles y Falcatruadas. Participaron 28 agrupaciones para vestuario y coreografía y 15 comparsas, que realizaron su recorrido rodeadas de numeroso público.

Las comparsas dieron color y pusieron mucha música de todos los estilos y nacionalidades a un desfile seguido por 19.000 personas -según las estimaciones del Concello- a ambos lados de Los Cantones y Puerta Real y después concentradas en la plaza de María Pita, donde cada grupo concluyó su paso bajo una gran carpa. Superhéroes, personajes de animación, muertos vivientes, animadoras deportivas, colegiales, animales diversos y Donald Trump -también convertido en muñeco vestido como si fuera el Papa presidiendo una comparsa- se sumaron a la fiesta como público por la calzada y en las aceras.

Desde la plaza de Mina hasta el ayuntamiento transcurrió el festivo espectáculo a partir de las cinco y media de la tarde y durante más de dos horas y media. Bailes al ritmo de música rock, pop, caribeña, rap o dance llenaron de dinamismo los números preparados por las comparsas con integrantes de todas las edades. De las que más expectación causaron -y sonrisas entre los asistentes- fue la de Xuntanza de Amigos da Xoldra, con una veintena de personas vestidas de cardenales lanzando agua bendita y moviéndose al son de populares canciones que expulsaban los altavoces de su equipo de música. En una especie de altar, un hombre vestido de Papa animaba a la gente a moverse mientras se retorcía con los ritmos musicales o fingía tocar una guitarra hinchable.

El jurado del desfile, en el que estaban la concejal de Facenda, Eugenia Vieito, y el director del Coliseum, Javier Rodríguez, valoró la singularidad de las carrozas y las comparsas, los materiales de elaboración, su confección artesanal, su complejidad y los acabados de los disfraces.

El martes 28 le tocará el torno al concurso de choqueiros en la plaza de España, con la cita infantil de disfraces de 16.00 a 17.00 y la de adultos entre las 19.00 y las 20.00 horas.