El Concello espera el veredicto de la Asesoría Jurídica municipal para saber cuáles son los pasos a dar antes de convocar una consulta ciudadana sobre el futuro de la fachada marítima de la ciudad. El alcalde, Xulio Ferreiro, anunció ayer que, en caso de que sea legalmente viable, su intención es hacer que este referéndum tenga "el mayor rango posible" en lo que a los terrenos portuarios se refiere.
"Creo que debemos decidir colectivamente, toda la ciudad, lo que queremos hacer con estos terrenos", señaló el alcalde. El Gobierno local, aseguró, está trabajando sobre un posible "diseño de usos" para el borde litoral pero Ferreiro recalcó que cualquier operación de este calado debe hacerse "de la mano de la ciudadanía".
Por el momento se desconoce qué cuestiones concretas serían votadas por los ciudadanos en la consulta. La idea de impulsar este proceso participativo parte de la Comisión Aberta en Defensa do Común, y fue aprobada por el pleno municipal a través de una moción presentada por esta entidad. Sin embargo, es una incógnita si la consulta se centrará en qué tipo de usos quieren los ciudadanos que se le den a los terrenos de Solana, Finisterre y muelles portuarios en caso de que finalmente pasen a manos municipales o si, en cambio, el debate se centrará en torno a si estos deben ser cedidos de forma gratuita o aceptando que el Concello pague a la Autoridad Portuaria.
Fuentes municipales señalaron que, aunque no está definido, ambas preguntas podrían formar parte de una única consulta. El BNG reclamó ayer que en la pregunta que se plantee se formule "claramente la devolución gratuita de los terrenos". "Esperamos que el informe que encargó el alcalde no sea otra estrategia de enredar y posponer las tomas de decisiones a las que nos tienen acostumbrados", aseguran los nacionalistas en un comunicado en alusión a la consulta realizada por el Gobierno local a la Asesoría Jurídica.
En caso de que se preguntase a los vecinos sobre la idoneidad de obtener gratuitamente los terrenos, la decisión no sería vinculante ya que estas parcelas son titularidad de la Autoridad Portuaria y, en última instancia, será ella quien decida si se entregan al Concello o se abre la puerta a una puja en la que gane el mejor postor. Un resultado a favor de la devolución a coste cero podría ser acatado por el Gobierno local, poniendo la gratuidad como línea roja en sus negociaciones con el Puerto, o simplemente usado como elemento de presión ante la Autoridad a la hora de llegar a un acuerdo más beneficioso para el Concello, aunque en él el alcalde se comprometa a dar algo a cambio.
El Gobierno municipal ha defendido en las últimas semanas la vía de la negociación con el Puerto para sellar un acuerdo "global" sobre la fachada marítima, a pesar de que a priori apoyan que la devolución sea gratuita. El concejal de Rexeneración Urbana, Xiao Varela, pedía la semana pasada comprensión sobre la necesidad de negociar y advirtió de que las posturas "enrocadas" podrían acabar derivando en una "polarización" entre administraciones que, en última instancia, alejaría al Concello del objetivo de recuperar estos terrenos para los ciudadanos evitando una venta a manos privadas. "En la medida en que la ciudad nos apoye, nuestra capacidad de negociar será mayor", remarcó el alcalde recientemente. Esta postura, a favor de dialogar con el Puerto fue duramente criticada por el Bloque, que entiende que la cesión debe ser gratuita.
Actualmente, el Concello y la Autoridad Portuaria mantiene conversaciones abiertas para decidir el futuro de estos terrenos. El Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria decidió el pasado jueves suspender por seis meses la subasta de La Solana y el hotel Finisterre. Concello y Puerto consideran que este margen de tiempo es "más que suficiente" para alcanzar un consenso. Sobre esta cuestión, el alcalde señaló ayer que el consenso puede ser "global", aunque planteando "calendarizaciones". "Estamos hablando de distintos terrenos, como es el caso de la Solana, Batería, Calvo Sotelo y Santiago", señaló el regidor, que llamó la atención sobre la "importancia" de renegociar los convenios que se habían firmado en 2004 y por los que el Concello aceptaba la venta de estos solares para construir viviendas y zonas comerciales, obteniendo con esta operación dinero para financiar el puerto exterior.
Asamblea de la Comisión
Esta tarde, a las 18.45 horas, la Casa Casares Quiroga acogerá una asamblea de la Comisión en Defensa do Común en la que se tratará de decidir una fecha y un manifiesto para la manifestación que se prevé convocar en defensa de la devolución de los terrenos de la fachada marítima. Otros de los puntos del orden del día, precisamente, tendrá que ver con la convocatoria de una consulta ciudadana. Por último, la entidad reclamará apoyo económico al Concello para poder sufragar su actividad y se planteará a todas las entidades participantes la posibilidad de contribuir a las finanzas de la entidad aportando 10 euros.
