La Policía Nacional continúa con la investigación de la desaparición de Manuel Rodríguez GómezManuel Rodríguez Gómez, un vecino de Visantoña (Mesía), de 27 años, al que se le perdió la pista durante la madrugada del jueves al viernes en los alrededores de Palexco, en pleno centro de A Coruña. El joven, que trabaja en un taller mecánico de Santiago, se trasladó con un amigo íntimo, también vecino de la parroquia de Mesía, a la ciudad para salir por la noche porque el viernes tenía el día libre. Ambos estuvieron en la discoteca Pelícano, situada en el centro comercial Los Cantones Village. Durante la madrugada, el amigo, que es el que llevaba el coche, decidió irse y Manuel Rodríguez se quedó solo en A Coruña.

La familia del joven indica que los porteros del establecimiento fueron los últimos que lo vieron. Según su versión, que fue corroborada por las grabaciones de las cámaras, le pidieron que abandonase el local porque cerraba y se sentó solo en las escaleras exteriores. Había consumido una cantidad normal de alcohol, como la mayoría de los jóvenes que salen por la noche. Tal y como relataron los encargados de la seguridad de Pelícano, estaba tranquilo y su comportamiento fue "normal", por lo que su familia sostiene que descartan que estuviese bajo los efectos de sustancias estupefacientes. En la última imagen del joven que grabaron las cámaras, según fuentes de la familia, se le ve que camina solo hacia el exterior del recinto del centro comercial Los Cantones Village.

Los agentes examinan los vídeos de otras cámaras de los alrededores para tratar de determinar hacia dónde se dirigió. En la zona, muy cercana al mar, hay vigilancia porque están situados organismos como la Autoridad Portuaria o la Diputación Provincial. Los especialistas también investigan la última ubicación de su teléfono móvil, que permanece apagado. El último wasap que se intercambió con su amigo fue pasadas las seis y media de la madrugada.

La familia de Manuel Rodríguez descarta la desaparición voluntaria o el suicidio. Su cuñado, David, que ejerce de portavoz, destaca que su vida era "normal", que no tenía problemas personales ni familiares. El joven, que tiene una hermana de 35 años, tiene pareja estable. Era la "primera o segunda vez" que se desplazaba a A Coruña para salir por la noche. Como el martes de Carnaval trabajó en Santiago, su jefe le había dado el jueves y el viernes libre, por lo que decidió trasladarse a la ciudad con un amigo. La familia solicita la colaboración ciudadana para dar con su paradero y pide "honestidad" a la hora de proporcionar pistas. El teléfono de contacto de David es: 646 090 529.