La renovación de la línea ferroviaria entre A Coruña y Ferrol, con una inversión de cuatro millones de euros en tres años, constituye una de las principales novedades entre los proyectos que el Gobierno central incluye en sus presupuestos generales para este año, que hoy ha presentado en el Congreso. Esta inversión, demandada unánimemente por los municipios afectados y por la Diputación, comenzará con una inyección económica de medio millón de euros este año, que Fomento, a través del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias, prevé elevar a 1,5 millones en 2018 y dos millones en 2019.

Para la variante de Betanzos, dentro de esta línea, el Ministerio de Fomento dedica unos simbólicos 50.000 euros, con una cantidad similar en 2018 y 400.000 euros en 2019, insuficientes para acometer obras de calado.

Más allá de este proyecto, los Presupuestos Generales del Estado, en lo que afecta a la ciudad de A Coruña, se limitan a obras ya previstas en ejercicios anteriores. El puerto exterior de punta Langosteira absorbe la mayor inversión prevista para una única actuación, con 17,65 millones de euros de inversión programada para este ejercicio, casi cuatro más de los que preveía en el anterior presupuesto para este año. El grueso del gasto se destinará a la ejecución de nuevas instalaciones, ya comenzadas en años anteriores.

La conexión ferroviaria, imprescindible para la plena operatividad de la nueva dársena, recibe una inversión reducida, 363.000 euros, que servirán para completar la redacción del proyecto, que la Autoridad Portuaria prevé concluir este verano. Fomento aplaza un año más la conclusión de la accesibilidad ferroviaria de Langosteira: ahora la sitúa en 2021.

La inversión en el aeropuerto de Alvedro, concentrada a través de la entidad pública Enaire, incluye como novedad el desarrollo de mejoras para la navegación, con el objetivo de facilitar la operatividad de la cabecera de la pista opuesta a la ría de O Burgo, lastrada por la falta de visibilidad en situaciones de meteorología adversa. A este fin destina 400.000 euros en 2017, complementados con un millón de euros en 2018 y 200.000 euros en 2019. La principal inversión relacionada con el aeródromo son los 3,24 millones de euros destinados a actuaciones medioambientales, en las que se incluye la insonorización de viviendas en las proximidades de la pista de operaciones.

En materia de carreteras, Fomento mantiene la ampliación del puente de A Pasaxe, cuya redacción de proyecto licitó hace un año; la conexión de la autopista AP-9 con la tercera ronda por Culleredo; y la ampliación de la avenida de Alfonso Molina. De estos tres proyectos, Fomento solo consigna una cantidad suficiente para iniciar la obra en el caso de Alfonso Molina (2,5 millones de euros), con fin de obra previsto en 2021. La conexión de la autopista y la tercera ronda se queda con 100.000 euros y hasta 2018 no recibirá un empujón real, con tres millones de euros. En el caso del puente de A Pasaxe, la inversión cubre solo la redacción del proyecto, no la ejecución de la obra.

La regeneración de la ría de O Burgo, un clásico en los últimos presupuestos del Estado sin que haya llegado a ejecutarse, vuelve a ser consignada con un millón de euros y su conclusión vuelve a aplazarse un año. El Ministerio de Medio Ambiente prevé concluirla ahora en 2020.