El Gobierno local llevará al próximo pleno la propuesta para que la Consellería de Medio Ambiente declare la zona de la Torre de Hércules Espacio Natural de Interés Local (ENIL). Es una fórmula que, si bien no trae aparejada ayudas económicas, sí que abre las puertas para que el Concello pueda optar a subvenciones de otras administraciones y ofrece una protección especial al área afectada.

En el pleno, el Gobierno local pedirá también el apoyo de los demás grupos para elaborar un plan de conservación y de uso público del espacio y para poner en práctica medidas para mantener los valores naturales de la zona.

La propuesta se fundamenta en la información contenida en el Mapa da Biodiversidade -elaborado por el grupo Naturalista Hábitat a petición del Concello-, que hace una radiografía de las especies naturales que vivían en A Coruña en el año 2016. En base a ese documento, el Concello propondrá que se proteja el entorno de la playa de As Lapas, la Torre de Hércules, también el campo de los Menhires, la cala de Adormideras, teniendo como límite en tierra el paseo marítimo.

En su informe, el Gobierno local apunta a que es "un espacio natural relativamente bien conservado, muy próximo a la urbe y que guarda todavía un patente atractivo natural y recreativo para el público visitante". A su favor, la zona tiene que es representativa de los acantilados del sector corológico Galaico-portugués (que tiene especies que aparecen tanto en Galicia como en Portugal) y que tiene "un enorme potencial educativo orientado tanto a la conservación de la naturaleza como al conocimiento" de los paisajes y ecosistemas costeros. En esta zona, como en muchas otras de la ciudad hay, sin embargo, plantas invasoras, como la margarita del Cabo y los plumachos, por lo que se ha visto modificada por la acción del ser humano, de modo que el Concello propone tomar "medidas correctoras" para salvaguardar la "naturalidad" del espacio. Esto implica, por ejemplo, erradicar "la celebración de ciertos actos deportivos de carácter agresivo con la naturaleza", tampoco se facilitará la apertura de nuevos caminos y pistas, ya que favorecen la penetración de flora foránea. El Correcán solidario, por ejemplo, no se celebró ya este año en las inmediaciones de la Torre de Hércules, como en la edición anterior, sino que se trasladó al paseo marítimo. El Concello introdujo también un calendario diferente de siega en este área para facilitar la cría de especies.

En la ciudad hay otro enclave que está en trámites para conseguir este grado de protección, que es el archipiélago de las Islas de San Pedro, que todavía está esperando a que la Xunta resuelva si le concede o no el título de forma permanente.