Agentes de la Policía Local detuvieron la pasada madrugada a cuatro personas en un local de hostelería del paseo marítimo por oponerse de forma violenta a la inspección que los funcionarios municipales iban a realizar en el interior, del que acababan de desalojar a 80 personas cuando ya se había superado el horario de cierre.

Los hechos sucedieron a las 05.30 horas de hoy, cuando los policías llegaron al establecimiento y comprobaron que seguía abierto. Tras vaciar el local, ordenaron a su responsable, un hombre de 25 años, que les permitiera efectuar una inspección, a lo que se negó al tiempo que apagaba las luces. Una mujer de 42 años que había estado en el establecimiento también intentó impedir la actuación, de forma tan violenta que tuvo que ser esposada y detenida.

Una vez dentro, los policías trataron de revisar el interior, momento en que el responsable apagó las luces y comenzó a arrojar objetos al suelo de forma violenta y arremetía contra los agentes, que tuvieron que detenerle. Una mujer de 23 años que había sido desalojada se lanzó contra los policías, a uno de los cuales golpeó en la cara con el bolso, por lo que también fue detenida, al igual que un hombre de 24 años que intentó impedir el apresamiento de esta mujer.

Al llevar a cabo la inspección, los agentes hallaron a un joven de 17 años oculto tras una cajas y tapado con un abrigo, por lo que fue conducido al domicilio de su madre en un vehículo sin distintivos policiales, mientras que los cuatro detenidos fueron trasladados a los calabozos bajo la acusación del delito de resistencia grave y desobediencia a agentes de la autoridad en el ejercicio de sus funciones.