La Policía Nacional puso en marcha la semana pasada un dispositivo de refuerzo para prevenir los robos en domicilios después de que entre el jueves y el domingo de la semana anterior -del 29 de junio al 2 de julio- se produjeran ocho asaltos con fuerza en viviendas, según apuntan fuentes policiales. Desde el funcionamiento de este operativo de vigilancia, que dispone más agentes de uniforme y de incógnito en patrullas motorizadas y a pie en las calles, el número de denuncias por robos en pisos ha caído a cero, señalan las mismas fuentes.
El repunte de estos delitos en tan pocos días hizo sospechar al 091 que un grupo organizado itinerante estaba operando en A Coruña desde finales del mes pasado, lo que activó el refuerzo policial de unidades rotuladas y camufladas de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana. Las fuentes policiales indican que los asaltantes sustrajeron básicamente dinero y joyas de los pisos forzados hace dos semanas en diferentes zonas de la ciudad.
La orden policial por la que se estableció el dispositivo pocos días después aludía a "datos recientes" que situaban a "varones de aspecto sudamericano" y a "autores de la ciudad" como posibles responsables de robos en pisos con métodos como el escalo, el resbalón, el bumping o la palanqueta para forzar las cerraduras y entrar en las viviendas, aunque no añadía cuántos delitos se habían cometido. Los mandos del 091 alertaban de que los refuerzos extremarían las labores de vigilancia en todas las zonas de la ciudad de lunes a viernes, especialmente por las tardes, con especial atención a tres zonas de la ciudad.
El delegado del Gobierno en Galicia, Santiago Villanueva, admitió la semana pasada que en el inicio de este verano se ha producido un "repunte" de asaltos en viviendas de la ciudad, aunque, sin aportar cifras, descartó que se tratase de una oleada delictiva. El representante del Gobierno central considera que es habitual la comisión de este tipo de robos en estas fechas debido a que muchas familias empiezan las vacaciones y dejan sus casas vacías.
La Policía Nacional reforzó la vigilancia policial para prevenir asaltos con fuerza en pisos después de que en el verano de 2014 sí se produjese una auténtica oleada de robos en el tercer trimestre y no se convocase la Junta Local de Seguridad hasta finales de septiembre. Aquel año sí creció el número de estos delitos en verano, pero, en contra de lo que afirma Villanueva, esa tendencia no se produjo ni en 2013, con el cuarto trimestre como el de más robos, ni en 2015 ni 2016, con repuntes justo antes del verano y en los primeros tres meses, respectivamente.
