La Feira das Marabillas, que empezará el próximo jueves y se prolongará hasta el martes 25 de julio, llenará la Ciudad Vieja con recreaciones, puestos, pasacalles, música y actividades para todos los públicos. En la plaza de María Pita se ubicará un año más la zona infantil Recuncho dos Pícaros, que albergará novedades como talleres de pan e hilado, repostería con chocolate y un rincón arqueológico.

El Ayuntamiento y la Asociación de Comerciantes de la Ciudad Vieja, que colaboran en la organización, han presentado hoy el programa de la feria, que conllevará un amplio dispositivo de seguridad y refuerzos en las líneas de autobús urbano diurno y nocturno. Además, la Concejalía de Medio Ambiente ampliará los servicios de limpieza y de recogida de basuras durante la celebración.

Los residentes de la Ciudad Vieja tendrán plazas de aparcamiento reservadas en A Maestranza, la Dársena y el Paseo de O Parrote con el objetivo de paliar la prohibición para estacionar en el barrio con la feria. El presidente de la Asociación de Comerciantes, Adolfo López, ha destacado que en la selección de puestos han primado aquellos que ofrecen "algo distinto" y disponen de una decoración que destaque entre las demás.

En total son treinta los tenderetes gallegos y el resto provienen de otras zonas de España y de Portugal. El presidente de la asociación comercial destacó que "lo más importante son las ventas y relanzar la actividad económica de la zona, ya que se calcula que pasarán por la Feira das Marabillas entre 170 y 180.000 personas, procedentes de dentro y fuera de Galicia".

Otra de las novedades de la feria es la ausencia de animales vivos, presentes en las ediciones anteriores. El año pasado, solo se mostraron gallinas, tras anularse la exhibición de otras especies, como camellos y aves rapaces, y la celebración de justas medievales en María Pita con caballos.