La implantación de la tramitación electrónica en la gestión de la recaudación tributaria del Concello permitió elevar un 42% la apertura de diligencias a vecinos por impagos de impuestos o tasas municipales. En este sentido, el proceso para poner en marcha una nueva aplicación tuvo paralizados algunos procedimientos durante cinco meses, lo que hizo decaer el cobro a coruñeses que no cumplieron sus obligaciones fiscales a tiempo.

Los responsables de Tesorería analizan que 2016 fue un ejercicio "atípico" en materia de gestión tributaria y recaudatoria, porque "los mayores esfuerzos se centraron en la preparación e implantación del nuevo aplicativo", lo que generó desfases recaudatorios respecto a ejercicios anteriores. "La circunstancia condicionó forzosamente los resultados obtenidos en el procedimiento de apremio", apuntan.

¿Qué es dicho procedimiento de apremio? Una vez finalizado el periodo de pago voluntario, el Concello comienza una serie de trámites para cobrar lo que le adeudan los vecinos y que suponen recargos en los impuestos o tasas. Se llama periodo ejecutivo al momento a partir del cual la administración puede incoar dichos expedientes encaminados a ingresar deudas vencidas y exigibles. Hay tres fases, con recargos que van aumentando y que desembocan en el embargo de bienes o en cuentas del deudor.

En periodo ejecutivo se recaudaron en 2016 un total de 9,23 millones de euros (incluidas obligaciones heredadas del ejercicio anterior). Dentro de esta cantidad, se ingresaron ya por vía de apremio (últimas dos fases), 5,5 millones. La reducción de cobros respecto al año anterior fue de un 10%, algo que consideran "aceptable" teniendo en cuenta "que las actuaciones estuvieron prácticamente paralizadas durante cinco meses.

De hecho, los responsables de Tesorería General argumentan que, a pesar de comenzar en octubre y gracias a la implantación de la oficina virtual, se mejoró en la última parte del año la recaudación ejecutiva en fase de embargo de cuentas. Así, iniciaron 12.718 procedimientos de embargo, un 42% más que en el ejercicio anterior a pesar de la merma temporal de actividad. Suman un importe de 3,12 millones de euros. Eso no quiere decir que esta cantidad se ingresase ya durante 2016, sino que se han abierto los expedientes para su posterior ingreso.

La memoria añade que las nuevas aplicaciones han permitido avanzar en la tramitación electrónica de algunos trámites pero aún faltan muchos procedimientos por "integrar, depurar e implementar con una auténtica firma digital".

Los vecinos coruñeses son, tradicionalmente, pagadores. En periodo voluntario, sin que el Concello tuviese que abrir ningún procedimiento extraordinario, se abonaron un 85% de los recibos. El índice de recaudación se eleva 0,5 puntos en el porcentaje bruto sobre el total puesto al cobro de recibos y liquidaciones de ingreso directo.