El balance de criminalidad en la ciudad en el primer semestre del año arroja resultados positivos en los principales indicadores respecto al mismo periodo del año anterior. Bajan todas las infracciones penales más comunes, a excepción de los robos con violencia o intimidación, que suben de 96 a 107, un 11,5% más. Los robos con fuerza en domicilios, establecimientos y otras instalaciones caen un 3,7% y, concretamente, los de pisos, un 23,6%. El total de infracciones penales creció un 4,9% frente a la rebaja a nivel autonómico del 0,7%.

Las entradas en domicilios, comercios, oficinas, empresas y otras entidades para consumar un robo fueron 257, diez menos que en 2016. Cayó, por tanto, un 3,7%, menos que la bajada registrad en Galicia (-12%). El Ministerio del Interior, que publicó ayer los datos del primer semestre, desglosa los robos en viviendas. Entre enero y junio de 2017 se cometieron una media de 0,7 delitos de este tipo en pisos o casas al día (126), ratio que en el mismo periodo de 2016 fue de 0,9 (165). La caída porcentual fue mayor que la gallega, del 16,3%.

El número de hurtos también decreció. Fueron 1.726 entre enero y junio de 2017, un 3,2% menos que las denuncias en los primeros seis meses de 2016. Las sustracciones de vehículos descendieron por encima de la media gallega, un 18,1% (de 72 a 59).

La mayor de las subidas entre el grupo de infracciones penales más frecuentes se localiza en los robos con violencia e intimidación. Pasaron de 96 a 107, un 11,5%. Además, en Galicia es un indicador que se recorta respecto a 2016, con un 10,1% menos. Las operaciones por tráfico de drogas fueron 11, dos menos que en el primer semestre de 2016.

Los datos publicados ayer por el Ministerio del Interior revelan la consumación de una agresión sexual con penetración en la ciudad entre enero y junio, un marcador que se había quedado en cero en 2016. El resto de delitos contra la libertad e indemnidad sexual fueron 25 (28 en 2016).

La ciudad no sufrió ningún homicidio doloso y asesinato consumado pero sí cinco en grado de tentativa, según concluyó la Policía Nacional. En cuanto a los delitos graves y menos graves de lesiones y riña tumultuaria, el indicador cae un 2,9%, al tiempo que en Galicia asciende un 10,3%. Realmente, fue uno menos que en 2016 (de 34 a 33). El total de infracciones penales fue de 4.715. Entre enero y junio de 2016 fueron 4.494. Es un 4,9% más, un indicador que en Galicia queda congelado (-0,7%).