El Gobierno local de A Coruña llevará al próximo pleno municipal --que tendrá lugar el lunes 11 de septiembre-- una moción que tiene por objetivo reclamar a la Xunta de Galicia la paralización de la instalación en Santa Icía de una planta de residuos industriales.

A través de un comunicado, el ayuntamiento herculino avanza que pedirá el apoyo de la corporación para trasladar una petición a la Administración autonómica en la que solicitarán que no se conceda permiso al proyecto que pretende crear una planta de almacenamiento de residuos industriales y urbanos en el lugar de Teixoeira, próximo a los núcleos de Novo Mesoiro, Feáns y la urbanización Breogán.

Así, justifican su oposición al proyecto con el argumento de que el proyecto "no tiene en cuenta ningún tipo de medida respetuosa con el medio ambiente" y "omite las repercusiones que tendrá su puesta en marcha en las condiciones de vida de los vecinos de las poblaciones más próximas".

A renglón seguido, el gobierno coruñés recuerda que la instalación de la planta de Santa Icía "ya recibió el rechazo por parte de diversas entidades vecinales y ambientales", al tiempo que duda tanto de la "necesidad" del proyecto como de "su adecuación a los cánones ambientales pertinentes".

Asimismo, apunta que el estudio del impacto ambiental admitido por la Xunta "cuenta con carencias gravísimas que deberían haber llevado a la administración autonómica a rechazarlo de carácter inmediato".

Además, dicho estudio, continúa Marea Atlántica, "no analiza el impacto de los flujos y tráfico de vehículos en la zona" ni tampoco "propone medidas correctoras suficientes para el ruido, el polvo o el respeto al paisaje y la ordenación territorial".

La concejala de Medio Ambiente, María García, ha declarado que, luego de "recibir alegaciones" y según lo que publica "la prensa", la Xunta "está dispuesta a recular y solicitar un estudio de impacto ambiental ordinario, que solicitará más requisitos".

"Aunque ahora trate de poner excusas, la Consellería admitió a trámite inicialmente un plan cargado de improvisación en el que existen graves omisiones sobre las repercusiones del proyecto en la vida de los núcleos poblacionales más próximos", ha incidido la concejala.

Por último, ha lamentado la "escasa voluntad de diálogo" del departamento que dirige Beatriz Mato para concluir que los vecinos de A Coruña y Arteixo "no se merecen una planta de estas características cerca de sus hogares".