El cementerio de San Amaro, además de morada del descanso eterno de sus ocupantes, guarda entre sus muros sus propios tesoros patrimoniales, lápidas anecdóticas y tumbas y panteones de gran interés cultural y arquitectónico. El Gobierno local pretende promocionar esos valores que enriquecen el camposanto coruñés y potenciarlo como punto de atracción turístico, para lo que acaba de poner en marcha un proceso para catalogar los bienes artísticos e históricos de San Amaro.

Tumbas de militares, escritores, historiadores, científicos, artistas y políticos; lápidas y panteones neoclásicos y modernistas, templos neorrománicos; arquitectura religiosa. Historia y leyenda. Información visible y secretos. Hasta 200 puntos de interés salpican el mapa del cementerio de la calle Orillamar, detalles artísticos y culturales que van a ser inventariados.

Durante el mandato anterior el Gobierno local, en colaboración con la Fundación Emalcsa, editó un libro y un plano-guía en tres idiomas del camposanto de San Amaro con motivo de su bicentenario; ahora el Concello saca a concurso la contratación de una asistencia técnica que detalle los trabajos necesarios para crear un catálogo de los bienes artísticos e históricos que reúne el cementerio: lápidas, esculturas, pinturas, edificaciones, nichos...

El inventario deberá también señalar las patologías o defectos de mantenimiento que presentan los bienes documentados, que serán incorporados a una base de datos que realizará la empresa adjudicataria y con la que se elaborará un mapa del cementerio mediante el sistema de información geográfica (SIG). Cada elemento tendrá que ser descrito mediante su nombre, su función, material, longitud, anchura y altura y localización dentro del cementerio. Las fichas de campo deberán ser aprobadas por el supervisor técnico del contrato, que podrá imponer modificaciones que considere oportunas en función de los objetivos del proyecto.

El Concello contratará a un equipo multidisciplinar y experimentado que deberá estar integrado como mínimo por especialistas en Historia del Arte, Restauración y Delineación, según apunta la edil de Medio Ambiente, María García.

Entre los ricos rincones de San Amaro que hacen apetecible una visita a quienes practican el turismo de cementerios están las tumbas de escritores como Curros Enríquez, Manuel Murguía o Eduardo Pondal y políticos y militares como Alfonso Molina, Pedro Barrié de la Maza, Juana de Vega y Espoz y Mina. También son curiosas la simbología celta oculta en sepulturas, las huellas de la epidemia de difteria que diezmó la población local en el siglo XIX o el punto en el que yacen los restos de soldados del III Reich fallecidos en un naufragio.

Además de este proyecto, el Concello ha llevado a cabo en los últimos meses rehabilitaciones de monumentos y reparaciones en determinadas zonas del cementerio.