Un hostelero de la zona de la calle Cormelana, en el barrio de Pescadería, expuso ayer en el escaño ciudadano del pleno de la Corporación la preocupación del sector por la intención del Ayuntamiento de declarar esta parte de la ciudad como Zona Acústicamente Saturada (ZAS) a consecuencia de las quejas remitidas por tres vecinos. Los hosteleros temen el impacto que esta condición pueda tener en sus negocios, por lo que reclamaron un encuentro con el área de Medio Ambiente.

La concejal de este departamento, María García, se mostró abierta al diálogo y propuso encuentros entre vecinos y hosteleros para abordar el asunto. La edil aclaró que la posibilidad de que la calle Cormelana y sus alrededores sean declaradas ZAS se está estudiando con datos e informes y comentó que el Gobierno municipal no tiene intención de recurrir a la vía punitiva, sino de "llegar a pactos" entre los afectados.