La Fundación Emalcsa y el Concello crearon en julio de 2016 en programa A Flotepara ayudar a familias coruñesas en situación de emergencia social. Desde entonces, se han concedido 208 ayudas con una inversión de 130.998 euros, lo que supone una media de 629,80 euros por beneficiario, según el balance de actividad facilitado ayer por la entidad a su patronato.

La iniciativa nació hace poco más de un año con el objetivo de dar atención inmediata a personas en situación o riesgo de exclusión que, de carácter urgente, necesitan recursos de apoyo. Esta ayuda social se concede siempre y cuando no existan otras posibilidades de intervención desde el sistema público de servicios sociales, evitando situaciones de desprotección.

La Fundación Emalcsa ofrece ayudas para hacer frente a los gastos de vivienda como puede ser pagar el alquiler de un piso o la fianza que demandan los propietarios, el alquiler de una habitación, la cuota de la hipoteca, estancias temporales en centros especializados o suministros de agua, gas y electricidad así como equipamiento básico, como los electrodomésticos. Además, se hace cargo de la compra de libros y material de menores y de prestaciones para la salud -tratamientos bucodentales o gafas-.

En el presente año, desde el 1 de enero hasta el 16 de octubre, el programa A Flote dio un impulso a 133 familias y concedió 139 ayudas, por lo que cinco beneficiarios recibieron más de una prestación. En dicho periodo, el importe total de las subvenciones alcanzó los 71.886 euros. De media, cada familia recibe 517,17 euros para hacer frente a sus gastos.

El Concello es el encargado de elegir a las personas beneficiarias de la prestación y de realizar la propuesta de abono, que irá acompañada del correspondiente informe social, en el que quedará justificada la situación de urgente necesidad y la imposibilidad de atenderla mediante otros recursos normalizados.