La Guardia Civil ha detenido en Eirís a cuatro hombres, de entre 27 y 33 años, por presuntamente traficar con droga en A Coruña. Los agentes se incautaron durante el operativo de 400 gramos de metanfetamina, una cantidad "nunca intervenida antes en la provincia de A Coruña", según informó ayer el equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga de la Comandancia de A Coruña, así como de cuatro kilogramos de cocaína de alta pureza. Los funcionarios también decomisaron cuatro vehículos, tres de ellos de alta gama, 23.000 euros en efectivo y utensilios empleados para adulterar, prensar y distribuir la sustancia estupefaciente.

La Guardia Civil sostiene que es "importante" la aprehensión de los 400 gramos de metanfetamina, una droga estimulante fabricada en laboratorios clandestinos especializados, frecuentemente ubicados en el norte de Europa, y achaca el incremento de su consumo en Europa al éxito de Breking Bad. La serie norteamericana está protagonizada por un profesor de química al que le diagnostican un cáncer y comienza a fabricar y vender metanfetamina para pagar el tratamiento y asegurar el futuro de su familia. La unidad antidroga advierte que la utilización de químicos tóxicos ocasionan "efectos altamente dañinos a la mente del consumidor, cambiando su personalidad, creando adicción con tan solo unos episodios de consumo".

La dosis de consumo habitual de metanfetamina, según la Guardia Civil, se sitúa entre los 5 y 10 miligramos, por lo que la sustancia incautada en A Coruña daría para vender entre 40.000 y 80.000 dosis, siempre según los cálculos de la comandancia. La investigación surgió hace ocho meses, cuando los agentes comenzaron a seguirle la pista al presunto cabecilla, de 28 años, quien los agentes aseguran que se había asentado en la provincia "con el propósito de pasar desapercibido y distribuir notables cantidades de droga". El supuesto líder de la red, a pesar de carecer de antecedentes penales, adoptaba medidas de seguridad "propias de la delincuencia organizada de primer nivel". La Guardia Civil indica que recurría a "avanzados sistemas y medios tecnológicos, encaminados a evitar su detección, seguimiento y control policial, entre los que destacan el inhibidor de frecuencia intervenido".

El resto e arrestados, de 27, 31 y 33 años, residentes en la ciudad, desarrollaban, según la Guardia Civil, "un papel en el escalón inmediatamente inferior y no menos importante, dentro de la red de distribución". Los cuatro detenidos fueron puestos a disposición del juzgado de Instrucción número 8, que es el que ejerce funciones de guardia.