"Ya no es una situación tan inhabitual", advierte el director general de la Empresa Municipal Aguas de A Coruña (Emalcsa), Jaime Castiñeira, sobre la sequía que padece la comarca desde hace meses, por lo que la compañía solicitó ya a la Consellería de Medio Ambiente que le autorice a acometer con sus propios recursos la conexión del lago artificial de Meirama con el embalse de Cecebre para garantizar el suministro de agua en el área metropolitana.

La Xunta justifica ese proyecto con el argumento de que duplicaría la capacidad de almacenamiento de agua en la comarca, de forma que el abastecimiento quedaría garantizado para un periodo de cien años, ya que Cecebre dispondría de forma permanente de un volumen mínimo del 30%.

"Emalcsa no puede esperar", pone de relieve Castiñeira, para quien la unión entre los dos depósitos "es una obra necesaria para el abastecimiento". El director general recuerda que situaciones de escasez de precipitaciones y el consiguiente descenso del nivel del agua en Cecebre similares a la actual ya se dieron en 2008 y 2011, por lo que Emalcsa trata de evitar que un periodo aún más prolongado de sequía pueda poner en peligro el abastecimiento.

La Xunta se plantea el enlace del lago de Meirama con el embalse ubicado en los municipios de Abegondo y Cambre, aunque no de un modo inmediato, a pesar de que ya invirtió dos millones de euros en las primeras actuaciones. Para acelerar el proceso y evitar que tenga que hacerse con carácter de urgencia en un momento de necesidad acuciante, Emalcsa está dispuesta a financiar los trabajos, presupuestados en ocho millones de euros y que incluyen un túnel de 1,3 kilómetros, con sus propios recursos, aunque la conselleira de Medio Ambiente, Beatriz Mato, se comprometió a finales de septiembre a tramitar con "la máxima agilidad" la conexión de Meirama y Cecebre.

"No ponemos en riesgo tiempos ni presupuestos", destaca Castiñeira sobre su iniciativa para asumir el coste de las obras, ya que asegura que Emalcsa "tiene la capacidad, aun siendo una empresa pública, de ejecutar esa obra", por lo que considera que "no debe esperar a otros tiempos para garantizar el suministro". La compañía participó en la reunión realizada entre los ayuntamientos de la comarca y Augas de Galicia hace dos semanas, en la que se planteó la adopción de medidas para reducir el consumo, aunque considera que esa iniciativa es insuficiente y apuesta por el incremento de la capacidad de reserva.

El Plan de Sequía elaborado por Augas de Galicia prevé la reducción del consumo y la modificación del caudal ecológico del río Mero con el fin de que en Cecebre se desembalse menos agua, pero el responsable de Emalcsa entiende que es necesario "buscar otro recurso" y que la comarca "tiene la suerte" de disponer del lago de Meirama, cuyas aguas considera que tienen una calidad "normal".

"En una situación de emergencia es la única solución que daría capacidad de recuperarse al embalse", explica Castiñeira, quien detalló que antes de iniciar las obras es necesario que la Xunta otorgue a Emalcsa una nueva concesión administrativa para la captación de agua. "También tenemos medidas a corto plazo para no esperar a esa obra si se llega a la situación de emergencia", advierte el director general, quien señala que esas actuaciones serían de carácter temporal y "para un caso excepcional", pero que la empresa "está obligada a buscar una solución" para los problemas que causa la escasez de reservas y que la conexión con el lago de Meirama es la adecuada para evitarlos.

"Esa obra la veo en un entorno metropolitano", comenta Castiñeira sobre el enlace de la antigua mina de carbón con Cecebre, ya que Emalcsa está obligada a garantizar el abastecimiento tanto a A Coruña como a los municipios de Arteixo, Cambre, Culleredo, Oleiros, Bergondo, Sada, Abegondo y Carral.

En el Esquema Provisional de Temas importantes que Augas de Galicia sometió a exposición pública a finales de 2013 como preparación del Plan Hidrolóxico de Galicia 2015-2021, la entidad pública incluyó el trasvase de agua de Meirama como "prioritario" en el apoyo al embalse de Cecebre. Sin embargo, la redacción final del plan hidrológico excluyó esa posibilidad y remitió el análisis de este "caso particular", como el del lago de As Pontes, al momento en que se incorpore al dominio público hidráulico.

El llenado de la antigua mina levantó sospechas sobre la calidad del agua, ante la posibilidad de que transporte sustancias nocivas, aunque la Xunta asegura que los análisis efectuados revelan que es adecuada para el consumo. Pese a todo, está previsto que la estación de tratamiento de agua de Cañás, en Carral, disponga de una instalación que elimine concentraciones de níquel superiores a las habituales.