La resaca de los encuentros de octubre entre Puertos del Estado y la Xunta primero (el día 10) y el Concello, el Puerto y el órgano estatal después (el 24) para avanzar en el futuro de los terrenos portuarios devuelve hoy al pleno municipal el asunto, sobre el que las administraciones han expresado discrepancias y siguen sin aclarar algunos aspectos. Será por sexta vez en una sesión desde diciembre de 2015, con hasta un total de nueve mociones, sumadas las dos que esta tarde presentarán el grupo del Gobierno de Marea y el BNG a propuesta de la Comisión Aberta en Defensa do Común; las siete iniciativas anteriores fueron aprobadas.

La reunión del pasado 24 de octubre resultó decepcionante para el Gobierno local, sobre todo por no despejar dudas respecto al destino de los muelles de San Diego a partir de 2022, cuando toda su actividad se desplace al puerto exterior, y por quedar apartado el Concello de futuras decisiones sobre la fachada marítima, que serán resueltas por el consejo de administración del Puerto. Dos semanas antes el dirigente portuario, José Llorca, y el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, pactaron a espaldas del Ayuntamiento no vender los muelles de Batería y Calvo Sotelo ni La Solana para que se mantengan como suelo público en manos de la Autoridad Portuaria, pero sí aprobaron la venta del hotel Finisterre y no se pronunciaron sobre sus planes para San Diego. Hoy el Ejecutivo de Xulio Ferreiro responde con otra moción plenaria.

El texto de esta iniciativa tiene como finalidad que el Concello no sea apartado de las decisiones que afecten al borde litoral de la ciudad y reclama al Gobierno central y a la Xunta que firmen el protocolo de colaboración con la administración local que el alcalde entregó por escrito a Llorca el día 24. La moción incide en el "derecho de la ciudad a decidir sobre la planificación y ordenación" de los terrenos portuarios, pone de manifiesto la "falta de lealtad institucional" de la Xunta y Puertos "con la ciudadanía" por excluir al Concello en sus negociaciones y solicita al Ministerio de Fomento que impulse y financie con "suficiente dotación para empezar las obras en 2018" la conexión ferroviaria al puerto exterior, una infraestructura de la que Llorca ha liberado al Puerto aunque no ha explicado cómo se costeará.

La moción de Marea será presentada hoy en principio sin la adhesión de ningún otro grupo municipal y la espera de que cuente con los apoyos del PSOE y el BNG, que criticaron a Puertos del Estado por desplazar al Concello de los contactos institucionales y no resolver interrogantes sobre los muelles.

Los nacionalistas expondrán otra iniciativa a petición de la Comisión en Defensa do Común -a la que tampoco se suman los socialistas en su formulación-, en la que entre otras peticiones incluye la devolución gratuita de La Solana y el Finisterre e insta al Concello a que modifique el plan general para restablecer la calificación de suelo público en todo el ámbito concesional de los terrenos que ocupan los complejos deportivo y hotelero.

Desde diciembre de 2015 la actividad portuaria ha pasado por el pleno municipal a través de preguntas orales y, contando con la que serán presentadas hoy, nueve mociones. Todas fueron aprobadas con mayor o menor respaldo, solo una por unanimidad, la del pasado 3 de julio, a propuesta de Marea Atlántica con la modificación de una enmienda del PP, que reclamaba que el Estado asuma el coste de la construcción del enlace ferroviario a punta Langosteira.