Un hombre fue condenado a pagar una indemnización de 9.000 euros y a seis meses de cárcel, que no cumplirá con la condición de que no vuelva a delinquir en los próximos dos años, por apropiarse de unas joyas que le prestó el propietario de un negocio de la calle Juan Flórez para que su mujer escogiese una de ellas.

El acusado reconoció que el 28 de enero de 2014 sobre las doce de la mañana accedió al taller de joyería y le pidió a su dueño que le permitiese llevar a casa algunas piezas para que su esposa eligiese una de ellas. La víctima se lo consintió porque se trataba de un cliente habitual y le entregó un par de pendientes de brillantes, un aplique para pendientes de perla, un colgante de brillantes y rubíes y una cadena de roles. Ambas partes llegaron a un acuerdo antes de juicio sobre la pena, por lo que el juez dictó sentencia oral en la sala. Contra el fallo no cabe presentar recurso.