Tres jóvenes reconocieron ante el juez de Penal 2 de A Coruña que durante la madrugada del 7 de diciembre de 2016 destrozaron diez vehículos que estaban estacionados en la calle Marqués de Amboage, cerca de la plaza de Cuatro Caminos. Los procesados golpearon todos los coches que se encontraron a su paso, se subieron encima de ellos y les arrojaron contenedores y mobiliario urbano. Los daños que causaron fueron tasados pericialmente en 4.612 euros. De la mayoría de los desperfectos se hicieron cargo las aseguradoras de los automóviles, que sufrieron daños como roturas de lunas, abolladuras, techos hundidos, espejos fracturados, golpes y parabrisas rotos.

Los acusados, dos de ellos con antecedentes penales, fueron condenados por un delito continuado de daños. Los procesados aceptaron ser sentenciados a pagar una multa de 7.200 euros, por lo que el juicio no se celebró y el magistrado dictó sentencia oral en la sala. Contra el fallo no cabe recurso porque fue dictado bajo la conformidad de todas las partes implicadas en el procedimiento judicial. Uno de los sospechosos también fue multado por cometer un delito leve de amenazas, pues tras ser detenido por la Policía Local, durante su traslado a un centro médico, trató de autolesionarse y les espetó a un agente: "Soy hijo de bombero, os vais a cagar, sé dónde vives y cuando te vea en la calle, ya verás".

Robos en O Ventorrillo

Un acusado que reconoció ante el juez que forzó nueve coches que estaban estacionados en el barrio de O Ventorrillo durante las madrugadas del 9 y el 10 de junio de 2014 aceptó ser condenado a dos años de cárcel. El condenado, nacido en 1985 y sin antecedentes penales, solicitará la suspensión de la pena con la condición de que no vuelva a delinquir durante dos años. Los desperfectos que causó en los vehículos fueron tasados en 3.136 euros.

El procesado utilizó el mismo modus operandi, que consistía en apalancar los marcos de las puertas para acceder al interior de los automóviles. Una vez dentro, los revolvía y se apoderaba de los objetos de valor que encontrase. En siete de los nueve coches no robó ningún efecto "al no encontrar nada de su interés", según indica el titular del Juzgado de lo Penal número 1 en la sentencia. El sospechoso fue sorprendido in fraganti por una patrulla de la Policía Nacional durante la madrugada del 10 de junio de 2014.

El acusado actuó en las calles Rodrigo A. de Santiago, Agra de Bragua y Monasterio de Jubia, todas en O Ventorrillo. De uno de los coches sustrajo dos cazadoras, unas gafas de sol y una caja de herramientas, mientras que en otro hurtó dos carteras de piel y una mochila, que contenía un neceser, cajas con anzuelos y cucharillas de pesca, una maquinilla de afeitar, un botiquín de primeros auxilios, unas gafas, una carátula de radio, cinco CD, un rotulador verde y dos cajas con plomos.