El voto a favor del PSOE a la incorporación de nueve millones de euros al presupuesto municipal que se debatirá en el pleno extraordinario de mañana está todavía en el aire. El portavoz del Grupo Municipal Socialista, José Manuel García, explicó ayer que sus manos solo se alzarán para aprobar esta propuesta en caso de que el Gobierno local acepte su pretensión de derivar "una parte importante" del superávit de 2016 a amortizar deuda.

El Gobierno local que, el 8 de noviembre, contaba con el visto bueno de PSOE y BNG para poner en práctica este cambio en las cuentas, ve ahora cómo se tambalea uno de los pilares que lo sostenía. Con esta incorporación de nueve millones de euros que no se habían gastado durante el pasado ejercicio, el Concello prevé invertir en la mejora de la eficiencia energética y alumbrado en el parque Europa, en la ronda de Outeiro, también en la ronda de Nelle, el polígono de A Grela y algunos tramos de Os Rosales, Labañou, Matogrande, O Castrillón y Matogrande. Para estas obras se reservan 3,6 millones de euros, mientras que para la incorporación de equipos para mejorar la separación de los residuos en la planta de Nostián se destinan 2,1 millones de euros.

Sobre este punto, la portavoz del BNG, Avia Veira, manifestó sus dudas el pasado lunes, en la Comisión de Facenda, de que tengan que ser las arcas municipales las que se haga cargo de esta inversión para optimizar la recuperación de envases en Nostián, ya que considera que es una obligación de la concesionaria del servicio, Albada. La renovación del asfaltado de Os Rosales asciende a 1,15 millones y el Gobierno local también tiene la intención de invertir medio millón de euros en reurbanizar otras calles.

"Si hay que asfaltar Os Rosales, nosotros no tenemos inconveniente, pero pensamos que no se puede gastar todo el dinero en obras. El superávit es muy grande y, si no tuviésemos deuda, estaría bien, pero con 70 millones de deuda, creemos que hay que amortizarla. Así no lo vamos a apoyar. Nuestra propuesta está encima de la mesa del alcalde, de él depende ahora aceptarla o no", explicó ayer a este diario García, que no se plantea la posibilidad de que su partido se abstenga mañana en la votación de la propuesta.

"En este caso, solo cabe votar a favor o en contra, porque abstenerse es permitir que se haga", comentó. Sobre si el PSOE pone una cifra concreta para dedicar a obras o si hay un presupuesto mínimo para cancelar deuda municipal, García aseguró que "no hay una cantidad decidida", pero que sí se debe "amortizar algo". "Cuando un ayuntamiento recauda más de lo que gasta y tiene deuda, tiene que cancelarla", declaró ayer García, que puso en cuestión también la política fiscal municipal, ya que considera que, actualmente, se está gravando de más a los vecinos, ya que no se invierte todo lo recaudado. Si el PSOE vota en contra de este cambio en las cuentas, se acaba la buena sintonía de la que, en los últimos meses, habían hecho gala el Gobierno local y los socialistas, que les llevó, incluso, a decir que el presupuesto de 2018 contará con el apoyo del PSOE para entrar en vigor en el mes de enero. Los socialistas de la provincia de A Coruña cuentan desde el pasado lunes con una gestora, dirigida por el vicesecretario xeral del PSdeG, Pablo Arangüena.

El Gobierno local canceló en este ejercicio cinco millones de euros del plan de ajuste al que el Concello se acogió en 2012, con el PP en la Alcaldía, una operación que recibió el visto bueno de todo el pleno y que se hizo con cargo al superávit de 2016.