La apertura de los centros escolares públicos de la ciudad fuera del horario lectivo para el desarrollo de actividades para la población infantil y juvenil, una de las reivindicaciones históricas del movimiento vecinal y educativo, comenzará a hacerse realidad a finales de este mes, aunque por el momento de manera experimental. El colegio Juan Fernández Latorre, situado en O Castrillón, será el primero que abrirá su patio a los niños del barrio para que realicen actividades deportivas.

El Concello experimentará con este centro su programa Aberto ao barrio, que pretende aprovechar las instalaciones exteriores de los colegios para realizar iniciativas deportivas. El colegio abrirá los viernes de 18.00 a 20.00 horas y los sábados, domingos y festivos de 16.00 a 20.00 horas.

Un conserje ajeno al centro que será contratado por el Concello se encargará de vigilar el patio, mientras que un dinamizador deportivo organizará y supervisará las actividades que se realicen. El programa cuenta con el respaldo del consello escolar del Fernández Latorre, al que se solicitó su opinión, así como con la autorización de la Consellería de Educación.

La concejal de Xustiza Social, Silvia Cameán, recordó que esta medida estaba incluida en el programa electoral de Marea Atlántica y es una reivindicación histórica de las asociaciones de madres y padres que permitirá "optimizar los espacios públicos" y suplir la falta de instalaciones deportivas en los barrios. Cameán recordó que en varios centros escolares de la ciudad esta carencia de equipamientos lleva a los menores a saltar las vallas de los centros con el fin de jugar en los patios y pistas deportivas, que a partir de ahora podrán ser utilizadas por los niños, aunque de forma reglada.

El Concello destinará 20.000 euros cada curso escolar por centro a este programa, cantidad que financiarán la contratación del conserje y el dinamizador deportivo, además de un seguro de responsabilidad civil que cubra las incidencias que puedan ocurrir. Cameán explicó que el programa se dirige inicialmente a centros de Infantil y Primaria, pero que podrá ampliarse a los de Secundaria en función de la demanda. La edil prevé que la relación de colegios que se sumen a este programa se incremente próximamente, ya que varios centros manifestaron su voluntad de abrir sus patios cuando terminen las actividades lectivas.

El Fernández Latorre, dispone de un amplio patio en el que existen pistas deportivas y que está cubierto parcialmente. La apertura de ese recinto a los niños del barrio hará posible incrementar la oferta de instalaciones para el ocio, ya que la vecina plaza de Pablo Iglesias cuenta con una pista deportiva generalmente saturada por su uso por los jóvenes del barrio, que cuenta con una elevada densidad de población.