Los conductores asociados a Teletaxi y Radio Taxi expresaron ayer su rechazo a las autorizaciones concedidas a empresas multinacionales de vehículos de transporte colectivo con una huelga que se extendió por toda España. Los taxistas se movilizaron contra las start-up como Uber y Cabify, a las que acusan de competencia desleal.

Desde las seis de la mañana y durante doce horas, en la ciudad circularon solo los 150 vehículos de servicios mínimos. Tan sólo un 28% del total de taxis disponibles, una cifra que alcanza los 522 coches. Los conductores en huelga se congregaron frente al Millennium para hacer una caravana reivindicativa por toda la ciudad y finalizaron frente a la Delegación del Gobierno, en la plaza de Ourense. "Los clientes comprenden este paro. No nos gusta hacerlo y por eso pedimos disculpas a los que salen perjudicados ya que es la única manera", manifiesta el presidente de la Asociación Herculina del Taxi, Leopoldo Villa. Entiende que estas huelgas "no serán algo puntual" sino que si es necesario, continuarán convocándolas. "Lo hacemos para que todos se den cuenta de lo que está ocurriendo", apunta. "Aquí hay casi 1.000 familias que viven del sector del taxi", señala Leopoldo Villa.

Según Leopoldo Villa, empresas como Uber y Cabify "quieren quedarse con el sector del taxi". Estas multinacionales ofrecen un servicio más económico que el tradicional a través de una aplicación web, lo que se considera "competencia desleal". Los taxistas exigen que estos nuevos conductores paguen licencia e impuestos y se respete la proporción de un vehículo de transporte colectivo por cada 30 taxis.

Esa es una de las razones por las que Uber todavía no se ha instalado en A Coruña. Actualmente la ciudad cuenta con 522 licencias de taxi, por lo que la multinacional norteamericana solo podría contar con 17 vehículos a su disposición, una cifra "insuficiente" que no le permitiría, alega, ofrecer el servicio con la mínima calidad que busca.