Los plenos municipales tienen habitualmente una duración que obliga a que los miembros de la Corporación se levanten de sus escaños en alguna ocasión para ir al cuarto de baño. El concejal de Marea Atlántica Alberto Lema iba a hacerlo el pasado lunes durante unas de las mociones de PSOE y PP cuyo debate se unificó, pero el alcalde le avisó de que no saliera porque iba a realizarse la votación. Lema no percibió los gestos de Xulio Ferreiro y tuvo que ser uno de los periodistas que cubría la sesión quien le advirtiera.