"La consulta, como herramienta de presión, es muy poderosa, pero no la podemos impulsar, aunque es nuestra voluntad hacerla porque no sabemos qué es lo que quiere la otra parte. No sabemos qué preguntar. Es muy difícil elaborar una pregunta que tenga potencia sin saber qué quiere la otra parte", explicó ayer el concejal de Rexeneración Urbana e Dereito á Vivenda, Xiao Varela, sobre la consulta ciudadana para decidir cuál será el futuro de la fachada marítima de la ciudad una vez que se hayan desafectado los muelles interiores de su actividad portuaria. Varela habló ayer de la consulta en el turno de preguntas del debate organizado por el Foro Cívico.

En su discurso, Varela defendió la necesidad de "luchar" para que los muelles no se conviertan en moneda de cambio ni en pasto para la especulación. "Ahora estamos en la batalla de dilucidar qué es lo que las otras administraciones pretenden", comentó Varela, que se mostró partidario de que, en la decisión de qué se hará con la fachada marítima, participen no solo las administraciones sino también las entidades y los vecinos que han puesto encima de la mesa el debate sobre la titularidad pública de los terrenos.

Varela adelantó que el camino no será fácil, ya que no han encontrado en Puertos del Estado ni en la Autoridad Portuaria ni la Xunta toda la colaboración que buscaban, aunque animó a los vecinos a no rendirse para impedir la venta de los muelles y el cumplimiento del convenio de 2004, que proyecta la construcción de miles de viviendas en los terrenos liberados.

Y es que, a pesar de que el presidente de Puertos del Estado, José Llorca, y el de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, pactaron en octubre al margen del Concello no vender Batería, La Solana ni Calvo Sotelo, ese acuerdo todavía no se ha rubricado ni se ha hecho público, de modo que el Gobierno local desconoce cuáles son los términos de la negociación. Tampoco sabe qué opina Puertos del Estado de su propuesta de crear un consorcio para la gestión de los muelles desafectados y que todas las decisiones se tomen con una visión global. A pesar de que le fue presentada hace dos meses, la entidad estatal no ha aclarado su posición sobre este convenio. La conselleira do Mar, Rosa Quintana, sin embargo, ya lo ha dejado de lado, ya que, en una intervención en el Parlamento, aseguró que la única hoja de ruta que se iba a seguir sería la que marcasen Feijóo y Llorca.

En su discurso, Varela alabó ayer la "valentía" de PSOE y BNG al alinearse con el Gobierno local y no con el PP en la decisión de que los terrenos desafectados tienen que tener uso público.

"No estamos hablando de un proyecto exclusivamente municipal, sino que percibimos que hemos conseguido representar a la mayor parte de la ciudadanía", comentó Varela, que dejó para más adelante la celebración de la consulta, para cuando las cartas de todas las administraciones estén boca arriba.