El temporal Bruno obligó ayer a decretar alerta amarilla y naranja por vendaval, lluvia y oleaje al menos hasta hoy. Los servicios de seguridad del Ayuntamiento cerraron ayer los accesos a las playas de la ciudad alrededor de las doce del mediodía por las previsiones meteorológicas, con riesgos de carácter importante por viento. El Concello también ha colocado cintas para impedir el paso peatonal a parques y jardines.